La resurrección
La otra noche mientras escuchábamos a numerosos jóvenes y niños venezolanos interpretando la sinfonía número dos de (%=Link(«http://www.biografiasyvidas.com/biografia/m/mahler.htm»,»Mahler»)%) , la resurrección , dirigidos por el extraordinario director inglés (%=Link(«http://analitica.com/va/arte/actualidad/4461170.asp»,»Sir Simon Rattle»)%), nos vino a la mente una idea, que desde ese momento, no nos abandona. En Venezuela estamos entrando en una nueva fase de nuestra historia en la que igual que en la obra de Mahler el triunfo de la vida se impondrá sobre las asechanzas de la muerte. Lo que ha ocurrido en los últimos años en el país ha sido una lucha agónica entre Tanatos y Eros. Entre el deseo de vivir en paz y la pasión desmesurada por destruir. Al escuchar estos niños producto de la idea grandiosa de (%=Link(«http://analitica.com/vas/1999.08.4/articulos/18.htm»,»José Antonio Abreu»)%) de llevar la música a los lugares más recónditos de Venezuela tenemos que reconocer que ni el pasado fue una pesadilla y que ciertamente el futuro es pródigo en esperanzas. Con ese nivel de espiritualidad que vivimos en el Teresa Carreño mal podemos entender los gritos destemplados de los que ven la campaña electoral basada sólo en la negación de la existencia del adversario. Lo que nos enseñan estos niños es que más allá de las diferencias circunstanciales, que pueda separarnos en un momento dado, hay en la base del pais una reserva impoluta que es capaz de superar en su melodía las disonancias del debate político.