Evans: Hay que resolver el problema de impunidad

Para resolver la sentida crisis económica del venezolano el politólogo, Nicmer Evans, de Marea Socialista, considera que debe abordarse primero el problema de la impunidad desde punto de vista ético y moral.

-¿Cómo caracteriza la actual crisis económica del país?
-Como una crisis que profundiza el rentismo petrolero, en los momentos en donde la caída de los precios es absolutamente determinante para tratar de generar alguna transformación del modelo. Es una contradicción.

Por eso hoy vemos acciones como esta. El presidente Maduro, prefiere salir corriendo a darle respuesta a la Polar, cuando dice que no tiene cebada para producir cerveza, pero al mismo tiempo hay una protesta por parte de aquellos que se benefician de la adquisición de medicamentos de alto riesgo, en las farmacias del seguro social porque tiene tiempo que no reciben.

Un gobierno que se jacte de ser socialista, humanista y revolucionario, lo primero que debiera hacer es pararse en una cadena nacional para decir que en este momento, teniendo la escasez más grande que es la escasez de divisas, prefiere priorizar para adquirir las cosas básicas y necesarias para el mantenimiento de la dignidad de la vida humana, que para comprar cebada. Y es que la cebada no sea un problema para quienes quieren cerveza. El problema es que tiene que pasar a un segundo plano, resolverlo con vías alternas, y no ser el primero en resolverlo.

-¿Cómo se soluciona esta crisis económica?
-En Marea Socialista estamos permanentemente discutiendo soluciones. Entre algunas de ellas hemos levantado como banderas. Hay unidad en relación a la necesidad de comprender que el problema económico no solamente se resuelve desde la economía.

Partimos de la necesidad, de que desde el punto de vista ético y moral, hay solventar el problema de la impunidad.

Si nosotros no hacemos una demostración real y concreta, de que hay voluntad política de impedir quela impunidad siga campante permitiendo un defalco de 259 mil millones de dólares, de fuga de capitales, y que se sigan robando todo el dinero que entra por el concepto de las divisas del país, entonces estaríamos verdaderamente afectados.

Por eso estamos proponiendo una auditoría pública ciudadana, que genere responsabilidades, investigaciones, sanciones necesarias, para dar una señal clara al país de que el asunto de la corrupción no tiene más sentido.

Eso no resuelve el problema. Eso tiene que estar acompañado de una serie de medidas.

Planteamos que la necesidad de un cese del pago de la deuda externa por un año. Permitiría el ordenamiento de las cuentas y tener liquidez hoy para resolver problemas que están afectándonos y, que sin embargo, el gobierno prefiere pagar deudas en lugar de satisfacer las necesidades que vive hoy el pueblo venezolano.
No es un problema en contra de los acreedores. Es un problema de reordenamiento de las cuentas. Si a los acreedores no les decimos, que necesitamos reordenar nuestra economía para seguirles pagando, lo que les estamos pagando hoy es pan para hoy y hambre para mañana.

Hay que honrar la deuda. Pero también hay que ser conscientes en relación con los niveles de gastos que tenemos.

Otro elemento fundamental es el reordenamiento de la administración pública. No en cuanto a la cantidad de personal. Hay que reordenar el personal para inclinarlos hacia sectores más productivos.

El análisis del gasto de la administración pública, nos permitiría generar ahorros.

El otro elemento es la disminución del capitalismo de Estado. No puede seguir controlando empresas de manera inútil para no producir nada. Mucho menos puede seguir expropiando empresas para no hacerlas productivas.

La posibilidad real de la participación de los trabajadores en estas empresas, puede ser una vía alterna que no nos invite a pesar que la única solución es devolverle las empresas a sus propietarios originales.

A los trabajadores hay que darles una posibilidad de que haya una reactivación del aparato económico. Eso implica desprender el control del gobierno y el sector militar en esta área.

Otro elemento que proponemos es revisar el proceso de control de cambio. No la medida de control de cambio, sino los tipos de ajuste y de anclaje que existen.

Es distorsionante tener un dólar a 6,30 y otro a 200 de manera oficial, y no decir del paralelo que está en 700. Esto trae profundas deformaciones a la economía.

Este ajuste cambiario debe estar acompañado de un ajuste salarial, en proporción a la necesidad, no de dolarizar a al economía, sino de entender que estamos en un mercado internacional que las cosas deben costar lo que cuestan. No debe generarse subsidios por parte del Estado al precio de las cosas. Debe haber más apoyo al salario del venezolano.

Otro elemento relevante, es atender la inversión en el sector petrolero. Debe atender a la pequeña y mediana empresa, sin descuidar a las grandes. Son las principales estimulación del empleo y de la diversificación económica.

Tenemos una industria petrolera abandonada y en desidia. Pudiese producir más sin romper los parámetros de la Opep. Pudiese satisfacer la demanda urgente de ingresos de divisas.

@ermartinezd