Unión Europea puede desatender a Mercosur si Venezuela no acepta Observación Electoral
(1) Hay diversos mecanismos internacionales que todos los países han venido aceptando a fin de que los procesos electorales resulten transparentes a la vista de todo el mundo. A Venezuela le interesa demostrar que la voluntad de los votantes se refleja genuinamente en el resultado electoral. No sería raro que la mayoría del electorado vote en favor del actual régimen del país, porque mucha gente prefiere “pájaro en mano que cien volando” y acepta al “malo conocido” aparte de que “don regalón” sigue siendo efectivo.
(2) Pero si el régimen no recibe el respaldo mayoritario de los votantes el 6D, eso no es motivo para que el mismo régimen se declare en bancarrota porque el proceso definitorio solamente ocurrirá en la elección presidencial de 2016. El régimen no debiera temer una posible derrota porque es parte de la realidad política en todo país. No pocas veces las derrotas preparan ganancias futuras. La solidez política se logra a base de experiencias de altibajos que son inevitables en todas partes.
(3) Al régimen venezolano no le debe interesar jugarse “topo a todo” prematuramente el 6D. Tampoco debe tratar de contener la ya visible presión internacional que puede conducir a un aislamiento en callejones sin salida que dificulten, si no imposibilitan, salidas airosas.
(4) En todo caso, si las consideraciones teóricas no siempre se aceptan como buenas consejeras, ningún régimen está realmente “blindado” y al fin y al cabo aquellos mecanismos internacionales se han inventado para ser aplicados. Tarde o temprano se aplican, directa o indirectamente, y por vías no siempre previsibles, como lo demuestra la aleccionadora realidad.