José Sabatino: “Todavía queda historia por escribir de Puerto Cabello”
Puerto Cabello, el principal puerto del país, tiene su historia. Una que viene siendo recogida y materializada en libros por José Alfredo Sabatino Pizzolante.
El abogado e historiador asumió la tarea de recopilar documentos, fotos y relatos, que además de plasmar en sus libros están a la disposición de investigadores, historiadores y escritores.
—¿Cuál es la historia de Puerto Cabello?
—Puerto Cabello es una ciudad, que si arrancamos con Borburata se funda en 1547. Pero que como núcleo urbano comienza en 1728 con la llegada de la Compañía Guipuzcoana.
Tiene mucha historia, que ha sido escrita por Carlos Brandt, Miguel Elías Dao, Asdrúbal González y Ramón Díaz Sánchez, pero que todavía queda por escribir.
—¿Cómo se desmontan los mitos?
—La única manera de desmontar los mitos es hacer investigación de archivos, tratando de llegar a las fuentes primarias y luego contrastarlas con otras fuerzas, como las hemerográficas y los testimonios.
Producto de ese trabajo, hemos abordado aspectos básicamente culturales. Aunque también Puerto Cabello tiene una historia bélica muy rica.
—¿Una ciudad cultural?
—Puerto Cabello es una ciudad que, a pesar de ser el principal puerto de Venezuela en los Siglos XIX y XX al igual que en el siglo presente, tuvo una actividad cultural sin parangón.
En el 1880 tenía un Teatro Municipal, que tiene capacidad para 2 mil personas y la ciudad tenía 12 mil habitantes. Eso da una idea de la importancia que la sociedad porteña daba al tema teatral.
Es el único teatro municipal de Venezuela que no recibió fondos del gobierno nacional para su construcción, porque lo hicieron los comerciantes.
—¿Cómo fue eso?
—El alemán y el holandés, que de una u otra manera dominaban el comercio, construyeron el teatro.
Eso generó todo un proceso de desarrollo cultural muy importante que llevó a la ciudad a tener una cantidad de periódicos, músicos y artistas, referencia no solamente de Venezuela sino también en el extranjero.
—¿Fueron las impresiones recogidas en libros?
—Todos los extranjeros que han dejado testimonio sobre Puerto Cabello se materializó como “La historia de la música en Puerto Cabello” y “La historia del comercio en Puerto Cabello”, así como en el último trabajo que preparamos “La historia del desarrollo urbano de Puerto Cabello”, escrito a través de 200 postales antiguas de la ciudad.
—¿En el aspecto musical es Puerto Cabello una ciudad de boleros?
—Hay que recordar que musicalmente es importante, primero por el tambor, por la presencia del elemento esclavo en los Siglos XVII y XVIII. Luego por la música académica, por los extranjeros que se establecieron allí. Quizás el exponente más notable, Augusto Brandt, el compositor y violinista, y después la música popular, entre la cual el bolero es el que domina.
Puerto Cabello ha dado boleristas como Carlos José Maitín e Italo Pizzolante (el último de ellos) pero también como Pedro Ananías y otros adoptados, como Ángel Arturo Lugo, el trovador zuliano que vivió en Puerto Cabello.
De Italo Pizzolante hemos recopilado música en dos CD, que son el complemento del libro que escribimos.
—¿Cuál es la canción porteña más famosa?
—Hay una canción inmortalizada, titulada “A la luz de la luna”, que escribieron un par de venezolanos, la música de Gaspar Olavarría Maitín y la letra del tenor Frenando Michelena, compuesta en la ciudad durante la década de 1880.
La partitura la dejó Michelena en el Metropolitan Opera House de Nueva York, donde fue localizada por Enrico Caruso en una de sus vistas. Le gustó y la terminó grabando para la RCA. Hay dos versiones de esa canción.
—¿Cómo decayeron las casas de comercio alemanas, británicas, francesas e italianas?
—Estas casas tuvieron su momento de oro en la última década del Siglo XIX. Con la Segunda Guerra Mundial comienzan su declive. En parte, por la manera en como se afectan las exportaciones hacia Europa. En otros casos, por las persecuciones de que son objeto muchos extranjeros. Y finalmente, por ese proceso que impone el petróleo.
@ermartinezd
