¡Que hable con Giordani!
Hace unos años, Luis Alberto Machado aceptó ser ponente en unas jornadas que tenía un grupo de universitarios. Pero entonces sucedió algo insólito: los jóvenes le mandaron un correo electrónico pidiéndole la ponencia con antelación «para hacerle correcciones y recomendaciones». ¡Yo me quedé de una pieza! ¡Unos imberbes queriendo corregir y hacerle recomendaciones a uno de los hombres más brillantes de este país!
Traigo a colación la historia por las recientes declaraciones del vicepresidente Arreaza en la Cumbre de los Pueblos, un evento paralelo al que tuvieron los líderes de la Unión Europea y la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) en Bruselas, donde invitó a Europa a «tomar lecciones» de los modelos latinoamericanos. ¿Es un cínico, un caradura, un ignorante, o todas las anteriores?
«En nuestros países (de Latinoamérica) han surgido modelos políticos y económicos que hoy están garantizando que el hambre disminuya radicalmente, que nuestras personas tengan más acceso a la salud, educación, trabajo, vivienda, que haya mayor producción para alimentarnos, para generar trabajos productivos»… Y añadió: «porque el neoliberalismo lo que dejaba diariamente eran muertos, hambrientos, sin vivienda (…) era el principal expropiador de cualquier tipo de propiedad, negaba la educación, la vivienda».
No voy a hablar de Latinoamérica, pero sí de Venezuela. Parece mentira que el vicepresidente no sepa que después de haber dilapidado tres billones de dólares en los últimos 16 años, tengamos los mismos índices de pobreza de cuando comenzó el gobierno chavista. En otras palabras, que lo gastado, (sin contar lo robado) no sirvió para nada. Que se necesitan 3,7 sueldos mínimos para cubrir la canasta básica –solo la canasta básica- de una familia de 5 miembros. Que aquí escasea todo lo básico, pero que hay caviar Beluga y champaña francesa (¿será para todos los «oligarcas» que según Arreaza viven aquí?). Que destruyeron el aparato productivo a punta de expropiaciones, que muchas de esas expropiaciones aún no han sido pagadas, y que sus siembras solo existen en su imaginación (como las matas de Acetaminofén).
El flamante vicepresidente como que no ha sido advertido de que en los hospitales les piden a las personas que lleven todo ¡todo! porque no tienen insumos. Desde algodón y jeringas, hasta prótesis y catéteres. Calmantes, antibióticos, sueros… Arreaza ignora, por lo visto, que hay pacientes con enfermedades crónicas que no cuentan con los medicamentos porque el gobierno no otorga las divisas. Los hospitales venezolanos son una vergüenza.
El VP no ha sido informado, por lo visto, de que cada vez más niños y adolescentes desertan de las escuelas, donde cada vez hay menos maestros y profesores por los sueldos de miseria que les pagan. Arreaza como que no sabe que los bachilleres que se gradúan en los liceos no cursaron varias materias, principalmente científicas. ¿Son éstas las «grandes misiones de protección social» en salud y educación?
Tampoco parece darse por enterado que tenemos el sueldo mínimo más bajo del continente, porque el cálculo ficticio lo hacen con el dólar a Bs. 6,30, un cambio que no existe. Si alguien que gana el sueldo mínimo –o cualquier sueldo, a menos que sea un pez gordo- en ninguna parte le cambian sus bolívares a dólares, si no es por el cambio paralelo. Y digan lo que digan éste está por encima de los 400 bolívares por dólar. De manera que el sueldo mínimo hoy está alrededor de los 15 dólares mensuales.
Arreaza no parece saber que las viviendas construidas –las que sirven- se han hecho con enormes sobreprecios y pingües ganancias… ¿quién va a querernos imitar?… ¡Ni siquiera los zimbabuenses, que tienen un régimen parecido al nuestro!
La guinda de la torta es que cuando hablaron de soluciones «neoliberales» , Arreaza, además de sentirse «incómodo», puso como ejemplo de «pueblo que se protegió del neoliberalismo» a Cuba. Hambre, miseria y esclavitud.
¡Que hable con Giordani! Ahora que «despertó», tal vez lo aterriza.
@cjaimesb
