A mi no me toquéis
No haber encontrado motivo para reprimirse de un prolongando silencio, el zulianísimo puente sobre el lago de Maracaibo, envía unas palabras dirigidas al presidente de la república y a su tren ejecutivo tomando posición sobre el viaducto, el descompuesto panorama vial y de infraestructuras que asolan al país a lo largo y lo ancho de su topografía. Escuchemos entonces al primo. Vai pues, si no te cuesta nada.
“No estáis esperando mis palabras, justo ahí está la verga. Que no haya levantado la bemba que se expande útil en mi elegante lomo, firifiris, por tanto tiempo, no la debéis tomar con peristanfláutica asquiecencia.
¡Ya baaasta’ chico! Digame vos ¿ustedes se creéis que los venezolanos son una partida de rabúos que pueden vivir entre basura, escombros, embelecos y la mollejera de ampolletas de sus consignas propagandísticas sobre proceso de cambios, la bicha bonita, el hombre nuevo y todas sus forondas divagantes y gaseosas vergaciones buscando así que les dé a los ciudadanos un ataque de amnesia de su trágica cotidianidad mientras estáis sin pausa ni tregua esfloretando el país? Me recuerdan aquel cura que daba unos mensajes de optimismo en la noche por TV y decía el hablachento empaquetao y grillúo: ‘Si a tu madre la apaturra un camión, sonríe a pesar de todo, sonríe hijo, sonríe.’.
Pero como váis a dar hoyo con bola con la infinita mamarra de ministros que ninguno sabe que le tocai. Existe- por dar un ejemplo- uno de industrias pesadas y otro pa’ las más ligeras. La semana que viene-! no les extrañéis primos¡¡- saldrá la del peso mosca, el de Betulio, o una misión -por los rebullones de lo del viaducto- llamada así como: ‘Misión los cayos del Petróleo Crudo’, y que pa’ curase las loras y los cayos de los pies.
Pero lo peor de todo esto, es el ocio, veneno mortal para asalariados fanatizados, que a falta de su utilidad funcional explica el festival para aguerrindársele al jefe en las redondas, en dirección a saciar- auspiciado desde el poder- el mesiánico e inocultable culto de los nuevos tiempos.
La religión nueva, la preocupación por la solidaridad internacional y la exportación de los infinitos beneficios de la revolución de la ‘chequera’ dan ar’ pelo el porque los ministros no sirven para un ‘carrizales’, ni el gabinete pa’ una verga de a metra, es entonces cuando se oyen las bartoladas y haciéndose los willi mays terminan por echarle la culpa al general Páez que desde Miami funge redivivo- junto a Bush y Orlando Urdaneta – como jefe de la saboteadora oligarquía conservadora. Incapaces:¿¡qué oligarquía der coooño!?
Se me diseñó y construyó en el gobierno de Rómulo Betancourt, personaje pugnaz, sin duda, pero alebrestado y mollejúo como una verga, , pues mientras buena parte de ustedes que hoy estáis en el poder practicaban lo que hacen hoy con esa molleja afición de desfloretar las vergas, quemar buses, dinamitar oleoductos, matar policías, secuestrar inocentes, el odioso Romulón simultáneamente que los desbraguetaba, repartías tierras, fabricaba modernas soluciones viales, viviendas, hospitales, escuelas y liceos, y aparte modestia, aunque suene que me emperifollo con farfullo, soberbios puentes, que siempre que no me toquéis vos, duraré para toda la vida.
Por Venezuela y la chinita se los pido”: no se les ocurráis nunca me jorunguéis una verga, ¡ni un tornillo piche primo!