Misiones 1
A pesar de que en el texto de la Constitución no aparece por ninguna parte el término revolución como tampoco el mandato para que gobierno alguno imponga “un tal socialismo del siglo XXI”, el presente régimen lo vocea, lo escribe y lo hace a su saber y entender y, supuestamente basa todo su accionar en esos “supuestos” no Constitucionales. ¿Y usted, apreciado amigo, que piensa de eso? ¿Lo comparte? ¿No?.
Si pensamos un poco en el presente “desastre nacional” y en los “verdugos voluntarios” que lo imponen tenemos que examinar bien sus creencias. Si los marxistas iniciales afirmaron alguna vez que “la conciencia determino el ser”, para estos perpetradores parece, al calco de Marx, que el “ser determino la conciencia”. Su casi permanente perorata de que la cultura política venezolana es la fuente inspiradora de sus banderas políticas, es realmente difícil de creer, de aceptar.
La muestra de que un 15% de electores (últimas elecciones) apoyo esa creencia absurda, para este tiempo (el 85% no les apoyo), tal como la implantación del comunismo cubano en Venezuela, es digna de prestarle especial atención.
Debemos buscar las pruebas históricas que se ajusten a los hechos, no las “chimbas” esgrimidas por los oficialistas para justificarse descaradamente y partimos del supuesto de que las fuentes documentales están disponibles desde hace muchos años, tanto en el país como en el exterior.
Tal vez cuando voceaban esas creencias a la mayoría de los venezolanos nos parecían ridículas, propias y acordes con los delirios de unos “renegados”, sin caer en cuenta de que estaban allí, de que formaban parte del pueblo venezolano y de que, aún, para buena parte de la población, seguirá siendo dificultoso aceptarlo porque nuestra visión del mundo esta basada en el sentido común, en los derechos fundamentales del hombre y del ciudadano y porque preocupa demasiado cuanto implica aceptar ese hecho.
En lo que va de este régimen, por todos los medios posibles, se le ha inculcado a los venezolanos creencias sobre el régimen cubano, sobre el comunismo, sobre la violencia, sobre la guerra, casi nos incitan a convertirnos a todos en verdugos voluntarios contra parte de nuestro pueblo, contra los estados unidos y contra otros pueblos de América y el mundo.
Es, entonces, conveniente estudiar con mas cuidado a esos “verdugos voluntarios” y/o “perpetradores”, a los diversos “batallones” (civiles, policiales, militares, paramilitares, etc.) que pueden constituir una muestra representativa o no, pero muestra al fin, de los venezolanos y venezolanas al ciego servicio del actual régimen en el poder.
¿Cómo entendemos que una minoría de venezolanos normales y corrientes y aquellos con otros atributos, de repente, se entreguen a este régimen y se vanaglorien de su nueva pertenencia destructora, corrompida y letal para el resto de la población? ¿Cómo entender que la historia política venezolana pariera unos verdugos voluntarios como quienes se han puesto en evidencia publica? ¿Acaso existía ya, inadvertidamente, cambios profundos de las ideas, creencias y de la moral en ese 15% de electores? ¿El estudio de los verdugos voluntarios y sus métodos nos ayudaría a entender mejor la sociedad venezolana actual y observarla bajo una nueva lupa? ¿Habrá que redefinir las características de la sociedad? ¿Cómo entender que un 85% se deje gobernar y manipular por un 15%?
¿Estos supuestos “revolucionarios” son los más profundos en el presente? ¿Esta supuesta revolución es la mas intensa y completa del mundo occidental? ¿Es una revolución de las ideas? ¿Es una revolución de la moral? ¿Es una revolución destructiva contra la civilización? ¿Es una revolución para construir un hombre nuevo, una nueva sociedad y un estado paternalista totalitario y racial en Venezuela y más allá, tal como lo proclamo Hitler en su momento?
¿Cómo se explica que esta sociedad, civiles y militares, derroto, en su tiempo, la lucha armada dirigida por los comunistas y los cubanos, y ahora permita un régimen adiestrado por cubanos comunistas y militares? ¿Insólito? ¿Cómo se explica su ascenso al poder por elecciones? ¿Asombroso?
¿Es una revolución que transforma la conciencia? ¿Es una revolución que imprime distinción a la población? ¿Es una revolución pacifica? ¿Es una revolución que les agrada a los venezolanos? Continuara. “Sin contrarios no hay progreso”, W Blake.