Qué hacer cuando le anuncian que lo van a operar

Inés sale del consultorio con dos noticias: la mala es que le acaban de encontrar un pequeño quiste en los ovarios y la deben operar; la buena: que su médico le asegura que la operación tarda menos de lo que dura un vuelo de Caracas a Miami.

Pero la condición nerviosa de Inés la obliga a procesar la primera información y empieza a ser sacudida por un estrés del cual sólo saldrá una vez que sea operada. A menos que cumpla los pasos de los especialistas, quienes aconsejan seguir las siete reglas de oro para afrontar con tranquilidad el ingreso al pabellón:

1. Infórmelo

Por muy pequeña que sea, no es bueno ocultar una intervención quirúrgica a los familiares y amigos más cercanos. Pero es obvio que si se va a ausentar por unos días del trabajo o de los estudios, algunos de sus compañeros se enterarán. Por ello, si lo hace antes, mejor, porque quizás algunos de ellos le transmitan alguna experiencia quirúrgica que hayan tenido, y esto contribuya a que usted se sienta más tranquilo.

2. Planifique con antelación

Si debido a la operación va a faltar a su centro de trabajo o estudios, explíqueselo a su superior inmediato, o al director del centro de estudios, de modo que, si tenían en mente algún trabajo o examen, puedan reprogramarlo o modificar la fecha de la prueba. Al dar a conocer previamente acerca de su situación, le evitará acumular más carga emocional una vez que se reincorpore a sus actividades habituales.

3. Relájese y sonría

Aprenda a desarrollar técnicas de relajación. Si la intervención le genera demasiada ansiedad, intente practicar unas cuantas respiraciones lentas y profundas. Focalizar la atención en un objeto de la habitación puede ayudarle a alejar de su mente pensamientos negativos y afrontar el nerviosismo. Piense en su lugar favorito y en lo que le gustaría hacer allí, una vez que haya salido del quirófano y se encuentre en su período de recuperación.

4. Pregunte, no se calle

Lo primero que aconsejan los especialistas es que el paciente efectúe las preguntas que desee. Es obvio querer ir seguro, de modo que el cirujano, el anestesista y el personal de enfermería podrán responder a sus inquietudes relativas a la intervención (¿Cómo me encontraré después de la operación? ¿Cuándo podré retomar mis actividades normales? ¿Me quedará alguna cicatriz?). Asegúrese de que le queden bien claras las instrucciones que le ayudarán a descargar el peso de las dudas o temores infundados.

5. Llévese su libro favorito

Tal vez antes de la operación, o ya en la sala de recuperación, descubra el placer de la relectura. Igual funciona con su música favorita, revistas, pasatiempos u objetos más cercanos emocionalmente.

6. ¿Cómo prepararse?

El médico le dará instrucciones acerca de lo que puede o no hacer antes de la intervención (instrucciones pre-operatorias) y sobre lo que puede o no hacer después de la operación (instrucciones post-operatorias). Podría pedirle que deje de tomar ciertos medicamentos en determinado tiempo antes de la intervención. Siga las indicaciones de su médico sobre las horas de ayuno que deberá hacer antes de la intervención. Después de la operación, es posible que tenga que restringir el ejercicio físico y otras actividades durante cierto tiempo.

7. Recupérese con tranquilidad

Para muchas personas la “aventura” de la intervención quirúrgica se transforma en una oportunidad para abandonar algunos hábitos nocivos para la salud, como por ejemplo, dejar el cigarrillo por un tiempo, o realizar algún tipo de ejercicio diariamente. De este modo, y con las recomendaciones del especialista, el paciente postoperado llega a descubrir lo placentero y saludable que resulta dejar de fumar para siempre, abandonar el sedentarismo, alimentarse bien, o tomar un descanso cuando el cuerpo lo pide.

Fuente: especialistas del Hospital de Clínicas Caracas