Con salario mínimo se gana menos de un dólar al día
La devaluación de la moneda es una manera silenciosa de meter la mano en el bolsillo de la gente.
Cada vez que el gobierno anuncia una medida restrictiva de la economía, aumenta el precio del dólar que se negocia en la calle, lo cual afecta el ingreso en bolívares de los venezolanos.
Aunque no se gane en dólares
A pesar de esta aparente despreocupación, la revisión de los salarios que devengan los venezolanos enciende una alarma, cuando se comparan con los ingresos de los trabajadores en otros países.
Ya sea a la tasa de cambio Simadi, o a la que se maneja en el mercado paralelo, el salario mínimo de los venezolanos se ubica en menos de 1 dólar diario (fluctúa entre 70 y 96 centavos de dólar por jornada laboral).
Comparando con otros países latinoamericanos, encontramos que los trabajadores argentinos, chilenos y ecuatorianos devengan hasta 17 veces más de lo que ganan los venezolanos. En el caso de los brasileños y los colombianos la diferencia es de 12; en los bolivianos de 10 y en los mexicanos es de 6.
Si se compara con el salario mínimo diario que ganan los trabajadores del estado de la Florida en Estados Unidos, el resultado es más deprimente todavía para los venezolanos. A 8,05 dólares la hora, un estadounidense obtiene por su trabajo diario, hasta 92 veces lo que gana un venezolano por una jornada diaria de 8 horas.
El poder adquisitivo
El impacto de esta desproporción, es lo que explica los índices que publica cada mes el Cendas-FVM, que cuantifica el Precio de la Canasta Básica Familiar (CBF) y el Precio de la Canasta Alimentaria Familiar (CAF), así como su relación con el salario mínimo.
Para el mes febrero de este año (2015), el precio de la Canasta Básica Familiar alcanzó los 33.759,96 bolívares. Lo que equivale a 6 salarios mínimos. En el 2014 para septiembre equivalía a 5 salarios mínimos y en mayo a 4,6 salarios.
En cuanto a la Canasta Alimentaria Familiar, se ubicó en febrero del 2015, en 19.858,07 bolívares, equivalentes a 3,5 salarios mínimos. Para abril del 2014, se necesitaban 2 salarios mínimos.
La simple lectura de estos dos indicadores advierten que con un salario mínimo, un trabajador no puede mantener a su familia.
Si tomamos en consideración, lo que ganan los trabajadores de otros países de la región, descubrimos que esos ciudadanos tienen un mayor nivel de vida que los venezolanos.
De acuerdo al Instituto Nacional de Estadísticas solo el 6,9% de los venezolanos pueden afrontar el costo de la Canasta Básica Familiar, al ganar más de 3 salarios mínimos.
Al considerar las comparaciones anteriores, lo que queda demostrado, es la permanente pérdida del poder adquisitivo del salario de los trabajadores venezolanos. Un deterioro que se acelera en la medida que se devalúa el bolívar y se incrementa el costo de la vida.
Las devaluaciones
Desde febrero del 2013, el Gobierno ha venido modificando las condiciones en las cuales se realiza el cambio del bolívar con respecto al dólar. Comenzó por ajustar primero la tasa de cambio, pasándola de 4,30 bolívares por dólar a 6,30.
Luego se creó el Sicad 1 (de Bs. 10 a Bs. 12) y la tasa Sicad 2 (entorno a Bs. 50). En el 2015 se fusionaron ambas tasas, ubicándose en Bs. 12 por dólar, y se creó la tasa Simadi, que este lunes 13 de abril se transó en Bs. 194,89.
Como si fuera poco este enredo del cambio a diversas tasas oficiales, por el dólar que se puede comprar en la calle o a un conocido, se debe pagar más (entre un 20 y un 40% para ser conservador).
Para el común de la gente, sobre todo para aquellos que se sienten cómodos con el estado de las cosas, la respuesta es muy sencilla: “yo no ganó en dólares para estarme preocupando”.