La Providencia 011 del Centro Nacional de Comercio Exterior (Cencoex), publicada en la Gaceta Oficial N° 40.636 el pasado viernes, obliga a que todo venezolano que tenga necesidad de solicitar dólares en ocasión a viajes al extranjero o compras electrónicas en otros países, solo podrá realizarlo a través de la banca pública.
Ante esto, expertos y usuarios dudan que los bancos del Estado puedan cubrir las demandas de los cerca de 2 millones de tarjetahabientes que según el presidente de la Alianza Nacional de Usuarios y Consumidores (Anauco), Roberto León Parilli, podrían emigrar desde la banca privada a causa de la nueva resolución.
Para el economista, investigador y profesor universitario, Rubén Darío Bolívar, la mayor consecuencia de esta medida recaerá en el ciudadano común que deberá dejar a un lado sus relaciones con sus oficinas de confianza para salir a otras que, en lo inmediato, no contarían con las estructuras físicas, de sistema y de atención al cliente para cubrir las demandas, si estas se llegasen a registrar de manera masiva.
Recalcó que habrán espacios donde las agencias de las principales ciudades “donde se concentran la mayor cantidad de tarjetahabientes”, no puedan continuar ofreciendo los trámites de manera normal, “tal como lo venían realizando hasta la semana pasada”. Aseveró que la falta de plástico para emitir las tarjetas puede afectar la producción de las mismas.
Sin embargo, el especialista indicó que “es necesario esperar” la reacción de los usuarios ante estos nuevos parámetros para dar un balance más cercano, pues no escatimó la posibilidad de que muchos prefieran mantenerse al margen del cambio de operador y continuar utilizando su tarjeta de crédito de la banca privada, únicamente para ser utilizada en compras a escala nacional.