Opinión Nacional

NOooooooooo…..¿Por qué NO?

Hemos perdido hasta la noción del tiempo y duele confesar, que nuestra mente pareciera estar siempre en una pesadilla escalofriante que nos martiriza; que produce en nuestro cuerpo y mente la audio-visión permanente e intolerante de discursos achantados, baladíes y pueriles, con los que este personaje cuya imagen intolerable y voz empalagosa nos atosiga, creyendo que somos interlocutores anodi-nos, capaces de asimilar como efluvio sus tontas mentiras, como lo hace el militar torpe con su tropa analfabeta. NO, no, no. No tenemos más capacidad tolerante para seguir soportando este aborto político. Basta ya de remilgos y autoengaños, dando la espalda y huyendo en estampida ante el ataque del promotor del peligro y ante su amenaza escudada por nuestra desidia. NO, no, no. Creemos que ha llegado la hora de apartar el escudo y dar el frente, estando preparados para armar la palabra con acciones de contundencia capaces de marcar la victoria.

Hoy el tiempo es nuestro. No sabemos cual podrá ser la estrategia mas apropiada para enfrentarlo, pero mientras tanto, utilizando la táctica militar, debemos aprovechar el flanco y el retroceso del ene-migo para dominarlo en su miedo, ya que ese frente que ofrece no es acción de ofensiva, sino el avance a retaguardia. Es la huida temero-sa, que no le permitirá seguir triunfando con la infamia de un nuevo “por ahora”.

Creemos que el tiempo es nuestro y contra el mando de un mal mili-tar, rodeado de malos e incapaces generales y comandantes, debe-mos aprovechar las enseñanzas de los grandes comandantes y ata-carlo de frente y por los flancos, conociendo su debilidad y su desgas-tada astucia. No hay dudas; sin sorpresa, pero con mejores armas y mayor masa la victoria está asegurada.

El Tcnel es un mal comandante, que siempre nos ha apabullado con la mayor y segura masa conformada por sus seguidores incondiciona-les, y por el fraude institucional del CNE. Pero como es sabido, la ma-yor ayuda se la ha dado la “reserva” abstencionista. Ese gran número de votantes, que engañados, equivocados o indiferentes, han cerrado el escrutinio con votación igual o mayor al triunfador. Entendemos que entre ellos han estado los ni ni, esos venezolanos que creen que los males que generen Chávez y sus seguidores no los alcanzará, o que les pueden abrir la puerta para disfrutar de los beneficios “revo-lucionarios”, sin ser marcados. También están los que han creído que pueden estar en la guerra sin armas ni trinchera. Los que hacen la guerra solo con su conciencia y que les ha permitido luego justificarse con el “yo te lo dije” del fraude. A ellos no les quitamos la razón por el resultado, pero si les criticamos su indiferencia, que algunas veces llega a la estupidez.

Hasta ahora y no por ahora, podemos hacer borrón y cuenta nueva, porque entendemos que el CNE tiene al menos un “bono” de tres mi-llones de votos para “entrampar” a los abstencionistas y que suman a la cuenta “revolucionaria”. Esto quiere decir, que con cuatro millones de votos duros rojos rojitos, la cuenta llega fácilmente a siete millo-nes. Esta cantidad le faltó a la Oposición para empatar o ganar. Es decir, faltaron los votos de la “reserva”.

Entendemos que muchos no den validez ni credibilidad a nuestra su-posición, pero insistimos, que en esta oportunidad, cuando las en-cuestas nos favorecen, para esta guerra o batalla, es sumamente ne-cesaria la “reserva” (abstencionistas), ya que sus votos indiscutible-mente aumentarán el valor del NO. No hay dudas en nuestra apre-ciación de la situación. Las encuestas no reflejan a nuestro favor, la mayor o menor disposición del voto abstencionista, sino una merma que estimamos entre 1 y ½ a 2 millones de los cuatro rojo rojitos in-conformes, que restados al SI le harán difícil al CNE consolidar el fraude. No nos atrevemos a creer que el CNE tenga, como dicen al-gunos, que tenga ocho millones de votos para el fraude. Pareciera esto muy difícil de justificar con la auditoría de mas del 54% de las actas y mucho menos si la maquinaria de reclamo en el cuido de los votos y en la calle, como han propuesto los estudiantes de los TRES NO, NO y NO se cumple.

Sin mucha algarabía, pero con un gran optimismo, creemos que la victoria está cerca y debemos estar preparados para el tercer NO, ca-lle el 3, el 4 y el 5. Recordemos que votar por el NO es para no hacer tan traumática la derrota de Chávez y la AN, ya que agotado este re-curso nos quedan las posibilidades del TSJ por la inconstitucionalidad, y el contra golpe de Estado. Una vez por todas, tendremos que de-fender nuestros derechos y evitar la implantación refrendaria de la dictadura.

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