Por qué no al aumento a la gasolina
El aumento del precio de la gasolina, ha sido siempre un tabú para los gobiernos. Hoy Maduro se enfrenta al dilema “cuasi shakespeareano” de: aumentar el precio de la gasolina o morir en el intento.
Ante la caída de los precios del petróleo; del fracaso estruendoso que ha tenido el gobierno y en particular Maduro en su gira por los países petroleros tratando de lograr un conceso para la reducción de la producción y estabilización de los precios; pero sin haber logrado recursos para enfrentar los compromisos internos y externos; el gobierno ha decidido prácticamente meterle la mano en el bolsillo a los venezolanos aplicando medidas neoliberales.
Por un lado la Sala Situacional y las agencias de publicidad del gobierno, pretenden vendernos un aumento del precio de la gasolina, con unas cuñas de TV con gran falta de creatividad y por el otro algunos analistas lo justifican como si fuera un problema coyuntural, económico o de estructura de costo, donde posiblemente tengan razón. Pero sucede que como en “el Caracazo” en 1989 el problema era político.
Algunas de las razones que habría que considerar antes de estar de acuerdo con un aumento del combustible, se pasean primero la:
Ineficiencia: el primer argumento es el costo de producción. En los últimos 10 años la nueva PDVSA le ha cuadruplicado el costo de producción del barril de crudo. Para 2003, era de 3,85 $, hoy se ubica por encima de los 12 dólares, lo que representa un incremento del 311%
Complicidad: la fuga de combustible: el gobierno y en especial los órganos del Estado responsables de la guardia y custodia de nuestra soberanía, han sido incapaces de impedir la fuga de combustible por las fronteras marítima y terrestres: por Guyana, desde el Dorado hasta y Bartica y desde Barrancas hasta Georgetown; por Brasil desde Sta Helena hasta la línea en el punto VB-8 y por Colombia a través de los 2200 km de frontera, donde el negocio se estima por encima de los 137 MM bs F al año.
Especulación: Un tercer factor para no estar de acuerdo con un aumento es el diferencial cambiario. El gobierno podrá duplicar o quintuplicar el actual precio del combustible y todavía será negocio para los traficantes. La única forma es llevar el precio de la gasolina a precios internacionales; lo cual es imposible para el bolsillo de los venezolanos.
Los subsidios: Los programas de cooperación. El gobierno pretende aumentarnos el precio de la gasolina a los venezolanos, pero por el contrario mantiene el subsidio a Cuba para que revenda en el mercado spot nuestro petróleo; financia el subsidio a Cuba y sus socios de Petrocaribe en condiciones más que desventajosas para el país, considerando que en este programa hay países que tienen un ingreso Per capital superior al de Venezuela como lo es Barbados y subsidia a los pobres más ricos del mundo, como son los indigentes en Boston a través del programa Energy Citizens propiedad de los Kennedy
El despilfarro y la impunidad. Frente a la corrupción, después de 15 años el gobierno es responsable de su propia ineficiencia, por el cual no podemos subsidiar su incapacidad.
Por estas cinco razones independientes de otras que cada quien pudiera tener, un aumento del precio de la gasolina significaría convalidar tres lustros de desgobierno. El problema va mas allá de lo esencialmente económico con ajustes coyunturales; el problema es político debido a que el Sr Maduro se ha convertido “intuitu personae” en uno de los factores a considerar a la hora de evaluar “el riesgo país”.
NO AL AUMENTO! generara mas corrupcion y despikfarro del dinero venezolano a sus chulos.