Opinión Nacional

Justicia y Política

Una vez más abordaremos un tema donde nuestra pasión abruma al conocimiento. Queremos referirnos al discurso que pronunció el ciudadano Francisco Carrasquero, magistrado de la Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia, el 30 de enero pasado con motivo del inicio del año judicial.

Los medios de comunicación han destacado que la tesis central de la oratoria del ex presidente del Consejo Nacional Electoral se fundamentó en la idea de que la justicia debe amoldarse a los cambios sociales y políticos de la sociedad.

Creemos que el planteamiento del magistrado está reñido con uno de los principios básicos del sistema democrático, cual es el de garantizar la independencia y el balance de los poderes públicos, amén de que coloca a los jueces en terreno movedizo que los aparta de los dictados de la justicia.

El lunes once de febrero, en el magnífico programa “Foro Casa de América” que emite la Televisión Española Internacional y dirige Marta Carazo, atendimos la interesante entrevista que le hizo al magistrado chileno Juan Guzmán Tapia, quien condujo las incidencias de las querellas que afrontó el general Augusto Pinochet por la desaparición de ciudadanos chilenos.

En dicha entrevista el decano de la Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales de la Universidad Central de Chile narró los avatares que tuvo que sufrir ante la intromisión de la política en el citado juicio. De acuerdo con sus expresiones, el poder ejecutivo dirigido por el doctor Lagos influyó de manera inconveniente ante la Corte de Justicia chilena aduciendo el pacto oficioso que se había suscrito con el fin de garantizar el cumplimiento del referendo que puso fin al gobierno del dictador Pinochet a cambio de su inmunidad.

Decía el doctor Guzmán Tapia que la justicia chilena está absolutamente desprestigiada y que la Corte desperdició la oportunidad que tuvo de recuperar la confianza de su pueblo y de su sociedad.

La justicia en Venezuela también se encuentra secuestrada. Se habla de que apenas un tercio de los jueces de las distintas instancias de la república han accedido a sus posiciones a través de los mecanismos establecidos y que los dos tercios restantes son jueces provisorios, accidentales o encargados.

El TSJ se ha desvirtuado de tal manera que en el evento correspondiente al inicio de las actividades del año 2007, sus miembros se constituyeron en coro de consignas electoreras oficialistas. Pocos o casi ninguno de sus magistrados puede invocar la mínima independencia necesaria para ser reconocido como un verdadero juez. Sus miembros están mucho mas ocupados y preocupados en complacer los deseos del ejecutivo que en impartir la necesaria justicia para garantizar la equidad social.

La historia de las actuaciones del máximo tribunal será una hoja triste en la del país. Pobre será el resultado del juicio al que serán sometidos quienes han sesgado los dictados de la justicia para complacer intereses secundarios y entonces habrá la oportunidad de reivindicar la justicia.

Nos llena de tristeza que el discurso aludido al comienzo ha sido desestimado por la sociedad venezolana.

Fundado hace 28 años, Analitica.com es el primer medio digital creado en Venezuela. Tu aporte voluntario es fundamental para que continuemos creciendo e informando. ¡Contamos contigo!
Contribuir

Publicaciones relacionadas

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Te puede interesar
Cerrar
Botón volver arriba