Entregados premios a los Grandes de la temporada 2014-15

La Liga Venezolana de Beisbol Profesional, Numeritos Gerencia Deportiva y LineUp International entregaron los premios a los Grandes de la Temporada 2014-2015, en acto celebrado en el Auditorio de Empresas Polar.
Odúbel Herrera brilló entre el resto de las estrellas del circuito, tras recibir los premios Novato del Año y Víctor Davalillo, como el Jugador Más Valioso. El jardinero de los Tiburones de La Guaira se convirtió apenas en el segundo pelotero en la historia de la LVBP que es distinguido con ambos galardones. Antes lo había hecho Ernesto Mejía, con las Águilas del Zulia, en la 2009-2010.
“Se siente bien estar al lado de tanta gente importante”, sonrío el zuliano, de 23 años de edad. “Doy gracias a Dios por tener una temporada tan exitosa en mi campaña de debut. No pensé que lograría algo así, pero cualquier pelotero que ama este deporte sueña con ese tipo de reconocimiento”.
Herrera encabezó a los toleteros de la liga en promedio (.372), fue segundo en hits (77), OBP (.432) y bases alcanzadas (115), tercero en slugging (.556) y segundo en OPS (.988), mientras que reunió 23 extrabases, un récord para novicios. El recluta fue el bateador más consistente en el lineup del manager Buddy Bailey, pese a los altibajos del equipo.
“Es una temporada que me dejó muchas cosas. Debo agradecer a (los coaches) Ángel Bravo y Lino Connell, así como a mis compañeros César Suárez y Alex Cabrera por todos sus consejos”, agregó.
Herrera estuvo acompañado de toda su familia y su padre Odúbel era el más orgulloso del grupo.
“Cuando estaba pequeño, a los dos años de edad, le gustaba tanto el beisbol que tuve que comprarle un bate, un guante y una pelota, porque cualquier cosa que encontraba en la casa la usaba para batear y rompía todo”, contó Herrera senior. “Así que siempre supe que iba a llegar lejos y qué mejor que con los Tiburones, mi equipo de toda la vida”.
El zurdo José Álvarez se llevó el Carrao Bracho, tras liderar el circuito con 1.91 de efectividad y 1.01 de WHIP, mientras que sus victorias (6) se convirtieron en la cifra tope del circuito, igualado con Junior Guerra y Manny Correa. También dejó el promedio más bajo de hits permitidos (6,35) y de average en contra (.200). Argumentos suficientes para ganar la elección del Pitcher del Año.
“No imaginé que iba a terminar con esos números. Siempre trato de hacer un buen trabajo y ayudar al equipo. Pero ahora falta la guinda del pastel, que es el campeonato”, destacó el as de Caribes de Anzoátegui.
Omar López, de 37 años de edad, guió a Anzoátegui al mejor récord de la ronda regular (39-24), un rendimiento que le sirvió para alcanzar sin sobresaltos el pase a la postemporada, luego de ser contratado como sustituto de Alfredo Pedrique. Esa actuación le valió el trofeo Alfonso Chico Carrasquel, que reconoce al Manager del Año.
“Todavía no asimilo la mayoría de las cosas que me están pasando. Trato de vivir día a día y poner los pies sobre la tierra. Me gusta estar bajo perfil. Tengo mucha fe para en que las cosas seguirán saliendo bien”, señaló el técnico valenciano, que irá a la final en su año de debut en el país como estratega, luego del apabullante dominio de la tribu en el Round Robin.
Alberto González se convirtió en una de las pocas luces de los Bravos de Margarita, que terminaron últimos en la ronda eliminatoria. El marabino, de 31 años de edad, había ligado tres veces por encima de .300 en su carrera de una década en la LVBP, pero su rendimiento decayó en zafras recientes y el año pasado dejó una modesta línea de producción (.227/.299/.295), con apenas 10 remolques. En la ronda regular de la 2014-2015 rebotó a .321/.357/.367 y estableció marcas personales en hits (76), dobles (8), anotadas (27) e impulsadas (23). Un rendimiento que le sirvió para alzar el Luis Salazar, como Regreso del Año.
“Muy contento porque las cosas me salieron bien. Era lo que esperaba Bravos de mí. Trabajé fuerte para no decaer. El año pasado me dejaron libre los Padres de San Diego y terminé en México, así que me preparé con la intención de volver al beisbol organizado y ayudar a Margarita. No pensaba en el premio”, dijo González.
Carlos Pérez, de los Leones del Caracas, fue reconocido por LVBP por sus virtudes como receptor con el galardón Manuel ¨Pollo¨ Malpica, que rinde homenaje a uno de los grandes mascotas del país.
También recibieron sus reconocimientos Deolis Guerra y Jorge Rondón (Setup del Año), Hassan Pena (Cerrador) y Félix Pérez (Productor).
“El bullpen del Magallanes tiene una gran profundidad y muestra de ello es que estemos aquí Hassan y yo, pero cualquiera en el equipo puede hacer el trabajo. Estoy muy agradecido”, enfatizó Guerra, que terminó la campaña regular con 11 holds.
“Las características del parque (Universitario) me ayudaron mucho, el clima (en Caracas) es mucho mejor (con relación al de Maracaibo, donde jugó la temporada anterior”, señaló Pérez, de los Leones y refuerzo de Caribes. “De cualquier manera es la pelota venezolana y hay que jugar y rendir en todos los estadios. Me siento en el mejor momento de mi carrera. Cuando juegas con amor y deseo las cosas salen bien”.
El cubano terminó la ronda regular con 38 impulsadas, 40 anotadas, 127 bases alcanzadas y 11 boletos, todos factores que sumaron en la fórmula matemática utilizada para determinar al ganador del reconocimiento, para un total de 252 puntos. Además, ligó .360 (222-80) de average, con 16 dobles, 2 triples y 9 jonrones.