Opinión Nacional

El populismo y la mediocridad solemne

Una de las características de los modelos populistas de gobierno se sustenta en la conjugación de variables culturales, sociales, económicas y psicológicas que generan relaciones de marcada sujeción hacia la figura del líder carismático, desvaneciendo en el seguidor, sujeto de una afiliación política con ribetes religiosos, cualquier pensamiento crítico e independiente.

Partiendo del macabro ejemplo de Adolf Hitler, y atravesando un follaje histórico latinoamericano con diversos episodios de gobiernos populistas, militares o autoritarios, la gestión de Hugo Chávez agrega cada día más, elementos de análisis peculiares que enriquecen al museo viviente del populismo como modalidad de acción y reacción política.

El micrófono aparece ante el diputado. El grabador se asoma ante el ministro tal. El flash encandila al jerarca del partido. Y de repente, la palabra se hace guión, y todas las vocales y consonantes se alinean, como temeroso ejercicio coral balurdesco, a la cantata presidencial. Quizá no evolucionamos de algún antepasado primate. Probablemente, fabulosa mutación mediante, descendemos de algún loro antiguo y lejano.

Sin olvidar los excesos del ánimo o los desmanes de la histeria ideológica de lado y lado, que niega toda existencia del contrario, hay en los especimenes de la fauna revolucionaria en el poder, una vocación diaria por ejercer el perenne papel de víctimas, para ocultar la absoluta incapacidad, la suculenta ignorancia que fluye por su venas, y la feliz mediocridad que, encumbrada, gobierna en apariencia, y desgobierna en lamentable realidad.

La mediocridad como noción, supone una conciencia del conformismo, la plenitud de la indolencia y la exaltación de la ignorancia propia, incapaz de mejorar y superar el conocimiento o la calidad humana del otro. La etiqueta socialista devenida obsesión, adorna convenientemente el regalo, que envuelto, encubre su inviabilidad material, y su arqueológica y trascendental inutilidad.

Ven acá Marulanda que quiero hablar contigo chico, vamos a reunirnos en la selva y a conversar, tu sabes, de tu a tu, y son uds. los límites de Venezuela, FARC, ejército verdadero, y te presento a Piedad, y cuidado le tumbas el turbante. Pero ¿qué cosa? ¿Infiltrarte yo? Uribe, ya no eres mi amigo. Me engañaste, cobarde, hijo de tu mamá, oligarca colombiano ¿Y cuál computador? ¿La laptop de Raúl Reyes? Pero no puede ser, y …¿Me nombra a mi? Bueno chico, no te creo, no, eso no puede ser, cómo se te ocurre, es mentira, intriga del Imperio, Bush, te conozco bacalao, aunque andes disfrazao, no, no, esa computadora está arreglada chico, todo el mundo miente…¿Qué yo apoyé a las FARC? ¡Como se te ocurre!, es un asunto humanitario vale, y ven acá Álvaro, ya no eres mafioso, ya no eres cachorro del imperio, y que bien te queda esa corbata, ven acá chico, toma mi mano…y dime…de verdad …¿Se murió Tirofijo?

¿Inseguridad? Bueno, quédese en su casa, no se le ocurra salir, ¿para qué quiere salir? Ud si es callejero. ¿Inflación? Eso es una vil campaña mediática. Con real y medio con real y medio con real y medio hice mercado, pagué servicios, salí de viaje, ahorre bastante, y aun me queda mi real y medio.

He allí el chiste de toda revolución que se precie. Luzca de izquierda, aunque actue como de derecha. Coma, y beba, y compre bastante, aunque hable de socialismo y critique el consumismo. Acumule activos y propiedades, aunque hable maravillas de las comunas y la propiedad colectiva. Culpe al imperio de todo, aunque aquí, con nuestro petróleo y sin pedirnos permiso, se promueva también otra forma de imperialismo con injerencias e intromisiones en países hermanos. Y así, por el estilo.

Y esta es una transmisión en cadena nacional. Escúchela. Observela. No importa el sitio, ni el tema. Ni la excusa. Mírelo, ahí está el Presidente, que bien se ve, y todos los lorit…perdón, los ministros. Y los diputados. Todo norma y protocolo. Mucha pompa y fastuosidad. En fin. Disfrútela. Que viva el populismo y la mediocridad solemne.

Fundado hace 28 años, Analitica.com es el primer medio digital creado en Venezuela. Tu aporte voluntario es fundamental para que continuemos creciendo e informando. ¡Contamos contigo!
Contribuir

Publicaciones relacionadas

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Te puede interesar
Cerrar
Botón volver arriba