Los Padres de San Diego se armaron para competir en 2015
El béisbol en el estado de California pasa por un gran momento .Después de una temporada del 2014 para el recuerdo -cuatro de los cinco equipos de ese estado avanzaron a la postemporada y los sorprendentes Gigantes ganaron la Serie Mundial – ahora se pronostica un 2015 aún más fascinante.
Los Padres ya no son el «patito feo» de la División Oeste de la Liga Nacional. Ahora es un equipo relevante gracias a una serie de astutas maniobras por parte de su gerente general A.J. Preller.
Hambrientos de ofensiva y jugadores de renombre para emocionar a su fanaticada, el lineup de los Padres en 2015 incluirá a tres peloteros de gran impacto.
Sin importar qué lugar del orden al bate les asigne el manager Bud Black, Matt Kemp, Justin Upton y Wil Myers tendrán la atención de cualquier lanzador que enfrente a los Padres – incluyendo a los artistas de la lomita en el Oeste de la Liga Nacional, Clayton Kershaw y Madison Bumgarner. Los zurdos, incluso los de élite, tendrán la dura prueba de enfrentar a un lineup de los Frailes repleto de toleteros derechos.
«Si anotamos más carreras y logramos lanzar como lo hicimos el año pasado, absolutamente podemos contender», dijo Black. «No hay duda alguna».
Si Myers es incluido en un rumor de cambio que traería al as de los Filis Cole Hamels de regreso a casa en San Diego, los Padres contarían con una rotación que podría superar a la de sus rivales de división Gigantes y Dodgers, así como la de los Angelinos y Atléticos en el Oeste de la Liga Americana.
Los Padres adquirieron a Kemp, Upton y Myers sin tener que deshacerse de sus abridores Andrew Cashner, Tyson Ross e Ian Kennedy. Al derecho Dan Haren, enviado a los Marlins por los Dodgers, le encantaría jugar en San Diego y aportar su veteranía. El bullpen, astutamente manejado por Black y el coach de pitcheo Darren Balsley, ha dado la cara hasta en los momentos más difíciles del equipo.
Kemp, Upton y Myers son todos cañoneros que batean a la derecha y son capaces de tomar ventaja de la barda del jardín derecho en el Petco Park. El receptor Derek Norris, quien llegó desde los Atléticos, y el antesalista Will Middlebrooks, recién llegado de Boston, también representan bates de impacto desde el lado derecho.
Kemp, quien está más acostumbrado a jugar en San Diego debido a que era un rival de división, trae consigo un historial ofensivo bastante bueno a su nueva casa. El toletero de Oklahoma ha compilado una línea ofensiva de .322/.372/.495 en el Petco Park, números que llevan a pensar que no tendrá problemas con las dimensiones de este estadio.
La temporada pasada, los bateadores 3-4-5 de los Padres se combinaron para un promedio de .225 con un porcentaje de embasarse de .307. El equipo ocupó el sótano en promedio de bateo (.226), porcentaje de embasarse (.292) y slugging (.342). De alguna forma, Black se las arregló para que su equipo terminara con 77 victorias, por encima de los Rockies y los D-backs.
Las posibilidades de los Padres de ser competidores con posibilidades de triunfo lucen altas por a su pitcheo – segundo en la Liga Nacional en promedio de efectividad con 3.27 – y las mejoras a la ofensiva realizadas este invierno.