Todos somos Americanos

Inteligente y sensato el Editorial de Le Monde, y es que el largo camino hacia una ´´liberalización´´de la economía y la política cubana llevará muchos años, paciencia y un proceso de negociaciones, donde resulta evidente que no sería con el presidente Obama que se verá algún resultado concreto. Quizá con una nueva administración ( probablemente republicana ) y con la dirección del PCC, se pudiese avanzar o retroceder en esta experiencia tan interesante como llena de de acechanzas y peligros. Todo dependerá del real extremo de necesidad del régimen cubano y de su sincera vocación por adaptarse a los nuevos tiempos. Lo cierto es que en el plano del discurso y la diatriba política, los cubanos son unos ´´maestros´´ y a su manera, tienen la rara habilidad de ´´sacarle punta a una bolla de billar´´. Y es que están entrando a este nuevo período de su historia en un momento en que los movimientos populistas de derecha e izquierda van ganando terreno en diferentes partes del mundo, como si se estuviesen recreando nuevas formas de fascismo y comunismo, algo que va sembrando las nuevas bases de una conciencia colectiva en proceso de maduración. El caso ruso es significativo, pues el señor Putin habla de la posibilidad de una guerra nuclear y el pueblo ruso comienza hasta considerar como inevitable y hasta necesaria tal posibilidad, algo realmente espeluznable ; los radicales islámicos con sus degollinas y crímenes espantosos, buscan resucitar un Califato y también tienen sus adeptos. Algo que la cultura occidental no puede entender ni aceptar, pero que para el mundo islámico cobra algún sentido ; los chinos ya han iniciado la modernización de sus ejércitos al igual que el Japón ; Corea del Norte haciendo la guerra de ´´ IV generación´´ y nuestro Papa Francisco, transformándose en un líder político y religioso que tiene a la estructura burocrática de la Iglesia católica en permanente revisión. Se dice que los obispos tiemblan cuando ven pasar al Santo Padre, y algo parecido sucede en el Opus Dei que no oculta su resentimiento y preocupación…Tiempos de cambios, guerras y ´´revoluciones´´ y con otro ingredientes no menos preocupantes : la economía global no acaba de arrancar en la forma adecuada como para crecer en las proporciones deseadas.

Pese a todo lo anterior la humanidad no pierde las esperanzas de que todavía es posible construir un mundo mejor ; sea ficción o realidad, la especie humana socialmente integrada quiere vivir mejor y con seguridad, porque el instinto de supervivencia supera cualquier miedo y lo obliga a innovar e inventar. Siempre habrá espacio para los emprendedores y la libre iniciativa, máxime cuando tenemos las herramientas tecnológicas para ello. El problema radica en que el vigente orden mundial se ha quedado obsoleto frente a la velocidad de unos cambios que requieren grandes transformaciones que nos están tocando a la puerta y nos negamos a ver y aceptar. Y es que bajo esta perspectiva, tanto Venezuela como Cuba lucen como ´´atrapados y sin salida´´, pero siempre hay salidas. El todo es derrumbar los falsos mitos y creencias atávicas que nos han colocado de espaldas a la realidad. El gran reto es ahora convencer a nuestros respectivos pueblos que la hora de los sacrificios y penurias apenas comienzan, sin ser ellos los responsables directos de la presente debacle, y con el agravante, de que los autores del desastre aspiran a ser siendo nuestros respectivos gobernantes. Un contrasentido evidentemente.

En la medida en que desarrollemos una mayor conciencia critica y propiciemos un cambio en nuestros patrones culturales podremos avanzar. Y es que lo mismo aplica para los Estados Unidos, donde esa alianza histórica entre las grandes corporaciones y los gobiernos exigen un cambio de mentalidad, pues no es lo mismo ser un Imperio que dejar de serlo. Y es que el ´´ Talón de Aquiles´´ de los Estados Unidos siempre ha sido su política exterior ; también Europa atraviesa por problemas de gran envergadura y no logra encontrar una salida. La semilla de los movimientos separatistas, el crecimiento de los grupos neo-nazis , la actitud frente a todo lo que huela al mundo musulmán entre otros problemas, no vaticinan nada bueno. Y la pregunta es : ¿ Están preparados para superar sus profundas contradicciones o dejaremos pasar el tiempo hasta que la gran debacle llegue ?. Una cosa es cierta, nadie, absolutamente nadie, podrá sobrevivir a un holocausto nuclear ni a un medio ambiente deteriorado incapaz de producir alimentos… No olvidemos que tanto los países del I Mundo como los del III, estamos navegando sobre el mismo barco, y que si este se hunde, naufragaremos todos juntos…