Gabriela Montero, la gran pianista venezolana

Gabriela Montero, “La Divina” señora de la improvisación y la ejecución de alto vuelo.

Gabriela Montero es una pianista dotada de un sonido vigoroso, muy limpio, de impresionante
belleza en la ejecución de un fraseo musical inspirado y espontaneo que combina
elegancia, precisión y profundidad en sus interpretaciones, en cualquiera de
ellas. Nunca huye de géneros, estilos o épocas diferentes, pero se le considera
que lo mejor de su repertorio es el clásico. Ha deslumbrado a las audiencias en
sus magistrales improvisaciones, una actividad a manera de divertimento que
cultiva desde que era una niña, muy precoz talentosa por cierto. Gabriela
Montero ha estudiado en Universidades de los Estados Unidos de América y
Conservatorios europeos. Ha sido profesora en universidades de Canadá. Ha
tocado en los más afamados auditorios, con las más prestigiosas orquestas del
mundo. Es hoy por hoy el músico venezolano mejor conceptuado.

Es autora de un concierto para piano y pequeña orquesta, compuesto en ocasión del Festival Argerich de Lugano (2012), intitulado Expatria, así mismo compuso una fantasía llamada “Mi Venezuela llora” ambas obras llevan una alusión explicita a la situación de conflictividad social que vive
Venezuela. Como si fuera poco, en una de sus célebres improvisaciones, mientras
tocaba con la mano izquierda una pieza venezolana, con la derecha realizaba “un
cacerolazo” una protesta casi diaria en la Venezuela de aquellos días. Esto por
supuesto, genera molestias en sectores del gobierno y sus simpatizantes, que
desearían mantener a los artistas de prestigio como Gabriela Montero en
silencio, con un “bozal de arepas”

Para finalizar una anécdota en la cual estoy involucrado. Cuando escribía mi libro “Cantantes
Líricos de Venezuela” en el cual hago un ensayo de 110 cantantes de ópera, a
quienes he escuchado en escenarios y con los que he hablado personalmente. Tuve
conocimiento de un joven barítono de Caracas que hacía carrera en Canadá, nunca
lo había escuchado: Emiliano Barragán. A través de amigos comunes él me envió
una grabación con arias de óperas de Händel, pude apreciar que era un estilista
soberbio, pero lo que más me impresionó fue la calidad indiscutible del
pianista acompañante, alguien dotado de un sonido maravilloso, no existía
pianista acompañante con esa calidad de sonido y expresividad, de seguidas le
escribí para preguntarle: ¿Quién era? La respuesta fue Gabriela Montero. Ella
gustosamente había accedido para que un joven barítono, su alumno en clases de
piano en la Universidad McGill de Montreal, grabara un demo para ser enviado al
autor del único libro que se ha escrito sobre los cantantes de ópera del siglo
XX venezolano. ¿Qué tal? Esto habla de una gran calidad humana de Gabriela
Montero “La Divina”

Gracias Emilio Figueredo por la publicación de las magnificas ejecuciones de esta artista, de quien los venezolanos nos sentimos muy orgullosos.