Wall Street el magnicida del mundo feliz de sabaneitor
El auto designado dueño de estos predios, resolvió declarar inmune la economía vudú venezolana de los embates de la mayor crisis capitalista del mundo en 80 años. Lo dijo antes de conocer que el precio del crudo petrolero se derrumbó de 140 hasta 80 dólares y por supuesto habría que preguntarle si sigue pensando lo mismo, cuando aterrice en 35-40, o mucho menos, luego incluso de recortes de producción OPEP.
En verdad me cuento entre quienes no lamentan el derrumbe de los precios de la cesta petrolera venezolana. Lo lamentará la parranda de chulos que viven del presupuesto paralelo de Chávez, que es de mucho mayor volumen que el que constriñe la cotidianidad de los venezolanos que trabajamos y padecemos su régimen.
De lo que estoy absolutamente seguro, es que estarán compungidos los esbirros cubanos, cuya burocracia rapaz y haragana esclaviza a Cuba, recibiendo sus suculentos sueldos y privilegios, pagados por nosotros, como es también el caso de los clanes de adulantes de ruinosas semi-naciones, dependientes ahora de la petrochequera de Chávez.
Que paradoja la de esta triste historia del mundo feliz de “sabaneitor”, quién a nombre de su tragicómica lucha “contra el imperio”, nos dejará de herencia una dependencia y fragilidad nunca antes conocida en nuestra historia, frente a las economías poderosas del mundo.
Solo a ignorantes irremediables o a fanáticos del estatismo cerril, se le puede ocurrir la peregrina idea que el capitalismo mundial no se recuperará, y más pronto de lo que creen, de esta coincidencia indeseada de todas las curvas descendentes de crisis cíclicas de pequeña, mediana y larga honda.
Para su información señor sabaneitor, el capitalismo movido por petróleo es el que está agonizando. Lo que viene son nuevas invenciones y la masificacion del consumo de productos originados en tecnologías que asombrarán al planeta por su eficiencia.
Desde su celda futura no le negaran ver documentales sobre maravillosos sistemas de transporte masivos y comunicaciones de impresionante performance, verá la victoria irreversible de la microelectrónica en la vida cotidiana de la mayoría de la población mundial y otra revolución agrícola basada en híbridos solo imaginados en la ciencia ficción, además de la multiplicación de crías de rebaños con selecciones genéticas de probada eficiencia, y un largísimo etc.
De esta crisis mundial sobrevendrá un crecimiento impresionante de fuerzas productivas armonizadas por fin con la naturaleza y otra oleada de nuevos inventos, tecnologías y tipos de industrias globalizadas. Mientras tanto usted seguirá rumiando con su sueño de morboso estatismo ruinoso castrista, como modelo de nuestro futuro…vaya al Callao…
La gran paradoja, señor “sabaneitor” sería seguir viendo en imagen 3D satelital y escuchando sonidos hiper digitalizados y en tiempo real, sus discursos locoides cultores de la barbarie, en medio del gran salto tecnológico que se avecina y que desmiente de antemano sus peroratas incendiarias sobre el fin del capitalismo.
La discusión casi erudita sobre estos temas se la dejo a expositores brillantes como mi amigo liberal autentico Ignacio De León. Solo agrego que del curiosear en la empantanada teoría catastrofista marxista clásica, se rescata la tesis de la inevitabilidad en la recurrencia de esas crisis cíclicas, ademas, sobre todo, del absolutamente demostrado error de esos mismos marxistas, al imaginarse que esta si es la crisis que acabará con el vigoroso capitalismo mundial, como piensa “sabaneitor” en sus reflexiones desde los topochales.
OH Ironía contra ese lector de gacetillas dogmáticas Hugo Chávez: La recuperación se reiniciará con la fortaleza de la moneda del imperio.
He sostenido por años que el peligro que nos acecha con la permanencia de Chávez en el poder NO es el famoso comunismo, sino EL CAOS, la barbarie, el desgobierno…y lamento recordarles que hacia el abismo tampoco hay limites, como no existen hacia arriba, en los sueños de prosperidad, si atináramos en como salir de este pantano de miserias ideologistas de la pandilla de malandros que se adueñó del Estado para destruirnos como nación civilizada.
Todavía mascullo en silencio la pena ajena que me produce nuestro liderazgo opositor. Pero ese fue el que decidieron impulsar… los que deciden… Esperemos la ideada victoria del 23 de Nov. de los que atesorando sus triunfos parciales tienen hasta un gran estado completo como negocio de cohabitación con la barbarie en ciernes y que nos pregonan permanecer en la abulia hasta el 2013.
Por mi parte, aunque padezca el caos tratando de llegar de Valencia a Caracas en 8 horas y asesinen a varios de mis vecinos, “entre las matas”, sigo “esperando el fin de las ilusiones”.
Me conformo por ahora con ver que el, tan deseado por Chávez, derrumbe de los castillos aéreos de valores “inflacionados” y que se desbarrancarán hasta toparse con el duro suelo de sus realidades mínimas de valor de mercado, en realidad a quien puede llevarse por delante y sin remedio alguno es al propio Chávez.
La petrochequera se queda sin fondos, o peor aun para él, con los únicos fondos que bien administrados en el postchavismo evitarían la hambruna local, de la que la gente ya se defiende a dentelladas, como se evidencia en centenares de conflictos diarios contra su porquería de gobierno.
Creo que ya estamos en deuda con los tracaleros de Wall Street, porque me ha dado por imaginarme que aprovechando este sacudón nos quitaremos de encima, ademas de Chávez, a los cultures del capitalismo de pacotilla de nos trajo hasta aquí, para dar paso a un verdadero capitalismo productivo eficiente, armónico con un Nuevo Estado, pequeño y sólido, de dictadura de la ley, en un país de propietarios privados.