Chávez ecologista
Hugo Chávez se alimenta de las cumbres. “Los presidentes andan de cumbre en cumbre y los pueblos de abismo en abismo” expresó alguna vez, pero -como siempre- no ha actuado en consecuencia. Sólo fue una consigna para la galería. Desde entonces, casi no se pela ninguna. A la pasada Cumbre Iberoamericana no fue porque el tema (la innovación y el conocimiento) se prestaba muy poco para el lucimiento demagógico.
Ahora, en Copenhague, ha hecho alarde de su verborrea elemental y pintoresca que llena titulares y espacios en los medios de comunicación. Hay quien asegura que Chávez se levanta (cuando duerme) todos los días para revisar en Google cuántas menciones tiene en Internet. Día a día lleva el registro de la repercusión de su demagogia. En el momento en que escribo esto tiene aproximadamente 12.900.000 de entradas. (Para contribuir a su anhelante ego y sumar una mención más, va esta nota).
Claro, está muy lejos de alcanzar a quien posee el récord. El fallecido rey del Pop, Michael Jackson, tiene 129.000.000 más o menos de resultados, es decir diez veces más que el jefe del socialismo del siglo XXI. De manera que declarar diariamente la guerra a algún país vecino no ayuda mucho para poder acercarse al ídolo musical más polémico y seguido de la historia. En esta competencia, la chequera desorbitada de Pdvsa poco puede hacer.
La bocanada de aire danés que ha tomado el Primer Locutor Nacional le ha dado una imagen de ecologista que está muy lejos de su desempeño. En estos once años de su desgobierno, los crímenes contra la Naturaleza se han multiplicado como nunca. Y hay un agravante: la impunidad también reina en esto. Así como no hay ningún funcionario preso por el robo de la banca boliburguesa, tampoco hay preso ningún depredador del ambiente.
Ahora Venezuela depende más que nunca del petróleo (como productor y consumidor), una de las energías más contaminantes. La revolución “bonita” no ha hecho nada por la promoción de energías renovables, como la eólica, por ejemplo. Los proyectos para aumentar la producción de energía hidroeléctrica han sido abandonados y las grandes represas existentes (todas construidas antes de la llegada de Chávez) no han sido mantenidas adecuadamente. De allí, la enorme crisis eléctrica del país, con dos tercios de su territorio afectados de apagones por 2 a 6 horas diarias.
Algunos cínicos han calificado tales cortes de “ahorro energético”, cuando en realidad han sido causados por la imprevisión y la irresponsabilidad de la administración, a cuya cabeza han estado los ministros de Energía Alí Rodríguez y Rafael Ramírez. Tal es el único “logro” ecologista de Hugo Chávez.
“Si el clima fuera un banco lo hubieran salvado”, es una frase efectista pero boba. Al fin de cuentas se demostró que la economía mundial podía salvarse y ya esos bancos internacionales están devolviendo los auxilios gubernamentales. Pero, ¿qué hacemos con este banquero de Cuba, promotor de otros colegas piratas, que regala y malgasta nuestro dinero “de cumbre en cumbre”?