Socialismo con glamour
Venecia, alfombra roja, hotel en la isla Lido, avión propio… ¡Qué clase! El líder intergaláctico, quien justo ahora ejerce su guiatura internacional con esa gira en la que destaca la democracia de los países anfitriones, avanza con más descaro por la vía contraria a la que toman sus dichos, en
materia de socialismo del siglo XXI.
Ser rico es malo, para qué sirve el dinero, ese capitalismo maldito, de dónde salió ese bojote de fluxes. ¿La Casona? Yo me conformaría con un apartamentico. Palabras y más palabras. Discurso para un soberano que tiene 11 años oyendo la misma cantaleta y el mismo tiempo viendo cómo el amo de
los bates se da la gran vida, sin entrar en sospecha de que le están metiendo un fraude gigantesco.
¿En qué anda el líder intergaláctico por estos días? Paseando y gastando real. En ambas materias es un experto. En estas vacaciones el comandante y su numeroso equipo, luego del tour democrático, deciden cambiar el paquete turístico y le meten dos destinos más. España y Venecia para ver su
película. ¡Qué lujo! Ver su película, caminar por la alfombra roja, sentirse una estrella de Hollywood y bañarse de aplausos. Para eso se paga una película. Para eso se contrata a un Oliver Stone. Para eso se tienen millones de dólares. Para eso se es dueño de un país. Discurso socialista, vida de magnate.
Como si el festival de Venecia fuera una sorpresa, como si nadie supiera que el evento sería por estos días, de buenas a primeras el magnate cambia el programa de viaje. Eso no lo cree nadie. Siempre estuvo en agenda, pero no era bueno hacer tanta bulla con un destino que implica narcisismo puro a un
costo elevado. Es a fin de cuentas un capricho capitalista que nada tiene que ver con los votos de pobreza de micomandantepresidente. Esa visita a Venecia, claramente planificada, revela el verdadero perfil de esta revolución. Y la clave está en que el socialismo se aplica a los súbditos y
el capitalismo a la cúpula que gobierna. Avión propio, nada serio qué hacer y muchos dólares es todo lo que se necesita para jugar a ser celebridad y pasear al socialismo como si fuera parte del equipaje. El hotel donde repentinamente decidió alojarse el líder intergaláctico tuvo que destinar un piso completo para dar techo a la comitiva revolucionaria. Menos mal que el hotel estaba medio vacío. Si el magnate no reservó y resolvieron ir allá de repente, casualmente el hotel tenía un piso limpio para los líderes de la revolución de los pobres.
Además de pagar con real ajeno los costos del avión y los gastos del gentío de vacacionistas rojos que lo siguen por el mundo, al líder no le tembló el pulso para cancelar 800 euros por habitación, en un hotel que dice en su site que «está situado en la elegante isla de Lido de Venecia y que hará de su estancia en la ciudad una experiencia única e inolvidable, regalándole el
máximo confort y bienestar en una estructura moderna, refinada y elegante».
¡Qué clase! Socialismo con glamour.
