La Unión Bancaria
Europa ha avanzado más en la Unión Bancaria que en la fiscal desde que el Tratado de Lisboa (2007) otorgó al BCE la potestad de supervisar el sistema financiero. La creación de una Unión Bancaria no es concha de ajo (hay 6.000 bancos en la zona euro).
La Unión Bancaria consta de tres pilares: el BCE, ente de regulación financiera; el Mecanismo Único de Resolución (Single Resolution Mechanism-SRM) y su fondo de rescate; y el fondo de protección de depósitos.
Después de una jornada de 18 horas, el Parlamento Europeo aprobó el 20 de marzo un acuerdo para instituir el segundo pilar de la Unión Bancaria. El SRM tendrá la facultad de prevenir y manejar crisis bancarias, determinará si hay o no riesgo sistémico, decidirá qué bancos liquidar o reestructurar e instruirá al fondo de rescate a actuar, el cual no será financiado con recursos de los contribuyentes.
El SRM supervisará los 130 bancos más grandes de la zona euro más los 200 bancos transfronterizos, los cuales conforman el 85% de los activos totales. Un fondo de 55 millardos de euros se constituirá en un período de 8 años, financiado por los propios bancos.
Los críticos del SRM señalan que el proceso de toma de decisiones es engorroso y el fondo muy pequeño para la dimensión del sistema bancario. No obstante, las autoridades europeas destacan la trascendencia de la decisión de establecer una Unión Bancaria supranacional.