El próximo fracaso: las comunas

No se detiene el Gobierno con los resultados adversos del 26S. Por la trampa legal y la reingeniería electoral, y ese secretísimo REP, sí mantienen la coba de que son una fuerza indetenible. Pero es eso, una coba más en medio de la mayor colección de cobas que país alguno haya visto jamás. Y, justamente, en esa onda comunista (otra coba), con el objetivo de darle poder al pueblo (otra coba) y tratando de que la gente pueda intervenir directamente en la dirección de sus vidas (otra coba) micomandantepresidente empujará el nuevo esquema comunal en los próximos meses. Es, según antecedentes gerenciales, lo que falta para que Chávez pierda otros 20 puntos en esa popularidad amellada que le queda.

Unos días después del revolcón que cogió en septiembre cuando se produjo el milagro chavista de sacar más diputados con menos votos, aunque se ponga bravo cuando se lo dicen, ya tenía peso en el ala para seguir alardeando de una mayoría que no tiene y menos para seguir adelante con los planes que Castro ejecuta en el país, se lanzó la aventura de expropiar Agroisleña. Otra empresa que con seguridad en menos de un año estará bañada de gerencia chavista, con un par de militares al frente, quebrada y mantenida desde Miraflores.

Esa es la historia del desarrollo bajo la concepción castrochavista. Nada en manos privadas, todo en manos militares. Al final todo termina en ruinas y mantenido con los dólares que paga el imperio por el petróleo. Así de simple es la economía chavista. Por eso, un sabio como Giordani, no puede con su submarino atómico.

Pero como Chávez es más comunista que su padre putativo, el zombi del Caribe, Fidel Castro, insiste en imponer un esquema fracasado, pero que a la larga hará a todos esclavos de la patica de militares que gobierna. Es esclavitud por dependencia económica. Nadie podrá dar trabajo, no habrá independencia. Chávez será, como lo va siendo, el dueño de todo. Lo que sigue de la ecuación es triste: la cúpula chavista es increíblemente incapaz e ineficiente, por tanto, como Sidor o Venalum, como Cadafe o el Metro, todos los consejos comunales, todas las comunas, serán un absoluto fracaso en su administración, en su día a día, en su planificación. Con el chavismo al mando ese proyecto es inviable. Si ni siquiera pueden arreglarle una calle desbarrancada a la Cota 905. Solo hay que imaginar, no a los flamantes ingenieros de la alcaldía de Jorge Rodríguez o los de la jefa a juro, Jacqueline Faría, sino a la gente directamente tratando de rendir los reales, si acaso les llegaron, para salir adelante en medio del barrial.

A esas alturas de chavismo pirata, gobernadores o alcaldes no tendrán plata ni para una cancha de bolas.