La diáspora venezolana en las antillas
La triste dimensión de la emigración sacude nuestra actual realidad ya que representa la pérdida de valores humanos. Es por ello que los candidatos de la Plataforma Independiente ProParlatino para las elecciones del 26S fuimos a buscar a esos venezolanos del exterior para pedirles que voten en los proximos comicios en los consulados de Venezuela, a fin de que todos seamos protagonistas de nuestro futuro país.
Es así como Julio César Pineda, estuvo en Miami; Pedro Paul Betancourt en Panamá, Gonzalo Himiob en República Dominicana, al igual que Gonzalo Colimodio y Hugo Santaromita. A mi me tocó el honor de visitar a Curazao y Aruba. Recordaba con nostalgia que en 1970 el Presidente Caldera acompañado por su canciller Aristides Calvani visitó las Antillas Holandesas, y pronunció su acertada frase: «Nos ta Ruman» (Somos Hermanos).
Cuatro décadas después, ese llamado sigue vigente a pesar de que la realidad ha cambiado y hoy, los venezolanos que procuraban “la escapadita perfecta” como resaltaba la propaganda, encuentran una tierra de asilo en lo económico, político, cultural y humano en Curazao, Aruba y las Antillas en general.
A pesar de lo dificil que es vivir fuera de nuestras fronteras, la experiencia de la venezolanidad ha sido cautivante: refiero tan solo una brevísima relación de algunas de las personas a quienes he podido contactar: el periodista Germán Gruber en sus emisiones diarias para el Canal 11; el rector de la Caribbean International University Luis Marín Ramírez; el World Trade Center, cuyo director Luis Beltrán ha llevado grandes proyectos consolidando en un espacio televisoras, radio, prensa, universidad, hotel, oficinas y centro de conferencias; el presidente de la Sociedad Bolivariana, el venezolano Nelson Yores, quien defiende con acierto la presencia histórica de los venezolanos en el Caribe.
En el mundo de la cultura, se destaca la pintora venezolana Nena Sánchez; en el área de la prensa escrita la venezolana Alejandra Sánchez publica diariamente sus entrevistas en “El Periódico”; en el campo comercial, jóvenes empresarios como Iliana Martínez, propietaria de “Arte Ávila”, se suman a la tradicional presencia de pescadores y vendedores ambulantes de la costa que se ubican en Punda. Todo ello ha permitido constatar la profunda dimensión de las relaciones bilaterales y la esperanza de reconstruir una Venezuela para todos después de las elecciones cruciales de septiembre.