¡Te lo pedimos, señor!
Que Venezuela tenga un gobierno cuerdo, democrático, amante de la libertad y respetuoso de los derechos humanos, que promueva y no hostigue la iniciativa individual y privada. Que no sufra de complejos y prejuicios absurdos. Que esté en capacidad de explicarnos verazmente y con detalles en que gasta el dinero que maneja.
Que Venezuela tenga un gobierno que no sea amante de la delincuencia y el terrorismo. Que construya las viviendas que necesita el pueblo. Que garantice que nuestros jóvenes puedan caminar con seguridad por las calles de los barrios y zonas populares y por todo el país, sin el temor de ser asesinados para despojarlos de sus teléfonos celulares, zapatos, laptops, relojes y prendas.
Que las familias de clase media y acomodada no vivan con el terror al secuestro Express y a los delitos masivos en urbanizaciones y edificios. Que los cuerpos policiales sean expurgados de oficiales y agentes delincuentes y cese la sensación de pavor de los ciudadanos cuando son abordados repentinamente por gente uniformada.
Que los estudiantes venezolanos no sean objeto del odio de los gobernantes y de sus sirvientes. Que se respete el talento de los profesionales venezolanos y que sus puestos de trabajo no les sean cedidos a mercenarios cubanos.
Que las libertades de opinión, información y expresión sean sagradas para todos los venezolanos. Que no sigamos siendo víctimas de la incompetencia e ineptitud del gobierno en el manejo de los servicios de electricidad, agua, gas doméstico, telefonía, Internet y otros.
Que cesen las mentiras y subterfugios para ocultar la incapacidad manifiesta del gobierno. Que sean derrotadas por el pueblo todas las maniobras y maquinaciones en la legislación electoral, inventadas por un gobierno aterrorizado por perder el poder y ser sometido a los dictados de una justicia imparcial. Que Venezuela toda recobre la esperanza y que tengamos una vida mejor. ¡Te lo pedimos, señor!