Opinión Internacional

Relaciones con China

El ministro de Asuntos Exteriores de China, Wang Yi, hace algunos días paso por esta capital en su segunda escala de su gira por América Latina, iniciada la semana pasada por Cuba, con paradas previstas en Argentina y Brasil. La gira de Yi por la región según fuentes oficiales chinas tiene un doble propósito: preparar la segunda gira oficial a Sur América del presidente Xi Jinping, prevista para julio próximo y fortalecer las relaciones en un espacio que hasta hace poco no había logrado penetrar, hasta le llegada del Tte Coronel Hugo Chavez al poder en 1999.

Es un hecho que Venezuela, – adelantándose a los EE.UU con el Presidente Ronald Reagan con Henry Kissinger 81/89 como Secretario de Estado dan un giro a la política exterior Norte americana con el reconocimiento de China comunista, curiosamente a través de la llamada “Diplomacia del Ping pong”; ya que hasta ese momento EE.UU y una gran mayoría de países reconocían solo a Taiwán-; durante el primer gobierno del Presidente Carlos Andrés Pérez, es uno de los primeros países en el hemisferio que establece relaciones con China, el 28 de junio de 1974. al igual que lo hizo con la Corea comunista, la Corea de Kim Il Sum y Cuba que había sido excluida ( no expulsada como afirma el gobierno de la Habana ) por la OEA por haber promovido y financiado la invasión armada de milicianos cubanos a Venezuela por las costas de Machurucuto en el Estado Miranda.

Hoy en día cuando la guerra fría es cosa del pasado, que la globalización impone las reglas del mercado, que la nueva economía condiciona los mercados internacionales y que las telecomunicaciones son un elemento clave en el fortalecimiento de la relaciones, la visita de un alto funcionario de un país amigo, con el cual se mantienen relaciones diplomáticas, siempre es bienvenida, más aún cuando este país es uno de los lideres mundiales. Sin embargo, la situación política y de inestabilidad que atraviesa el país; las condiciones preferenciales que el gobierno de Venezuela le ha dado a las relaciones con China en desmerito a otros países y socios comerciales; el numero excesivos de acuerdos firmados (más de 500) durante los últimos 14 años, aunque una gran mayoría no han sido aprobados por la Asamblea Nacional, hacen que estas relaciones sean algo inmanejable en cuanto a su ejecución, control y seguimiento, para un Ministerio de Relaciones Exteriores de las dimensiones y condiciones en que se encuentra la Cancillería venezolana.

Para un país como Venezuela, la cooperación internacional es una fuente inagotable de oportunidades, conocimientos técnicos y recursos financieros; áreas como la automotriz, vivienda, tecnología, infraestructura” siempre serán oportunidades de desarrollo; pero luego de la firma demás de medio millar de acuerdos internacionales, los cuales no se han desarrollado en su totalidad; que la Asamblea Nacional no los haya aprobado; que los mismos no hayan sido desarrollados en su totalidad como es el caso de los proyectos de vivienda; que estos acuerdos no sea fuente de trabajo para los venezolanos ni oportunidades para el capital ni las empresas nacionales; que el Fondo Chino establecido durante la presidencia del Ttc Coronel Chávez como un mecanismo que ha permitido a Venezuela recibir 15.000 millones de dólares, haya sido denunciado como una fuente de corrupción, hacen que las relaciones sino venezolanas sean sujetas a una profunda revisión por el órgano de control de l poder ejecutivo como lo es la Asamblea Nacional para los intereses de nuestro país y no utilizadas para la penetración de un modelo político no acorde con nuestro sistema democrático

 

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