Chávez morirá antes de dos años
Chávez vive no más de dos años, según pronostica el médico de la familia presidencial, que como profesional resolvió despejar de un sipotazo todas las invenciones, simulaciones y habladeras de pendejeras sobre el cáncer del interfecto. Estudiemos entonces las consecuencias del Pronóstico firme del cirujano Salvador Navarrete Aulestia.
¿Qué razones tendría el Dr. Navarrete para mentir? Les puedo jurar que aquellos que vienen diciendo que Chávez no tiene nada, agregarán que este médico es parte del show y de una alta maniobra política del poder.
Definidamente no tienen remedio, como Chávez tampoco, sino la de morir en su ley.
Nuestros fanáticos no creen ni viendo el cadáver. Pues creerán cuando vean a los suyos apartados de él, como Navarrete, por cubanos matando gente que se acerque a su palacio de moribundo, creyendo que pasa a la historia, como un demiurgo de una nueva época de grandes transformaciones, cuando solo llegó al escalón ramplón del más grande repartidor de real y derrochador de bienes públicos de los venezolanos, que deberán pagar luego la factura de su espantapájaros de revolución.
Le preguntan a Navarrete. VFG: “¿Cuál es el escenario con Chávez enfermo en 2012?” Y él responde habiendo sido, o siendo aún militante chavista: SN: “Ese escenario tiene dos opciones: uno con Chávez candidato y otro sin él. El Presidente puede morir y los militares tendrán que tomar el poder por un tiempo; o, si su enfermedad le impide ir como candidato, el oficialismo perdería las elecciones”
Pregunto a mis detractores, a quienes les irritan mis reflexiones: ¿Puedo entonces añadir que discutir sobre la fatal transición y ruptura que viene, es lo único serio que puede hacerse, desde la resistencia u oposición real a este régimen en bancarrota, por la segura y pronta desaparición de su creador y sostén?
Hay que elegir es a quien pueda irrumpir el escenario, con el firme propósito de no dejarse chantajear y asumir, que la fractura de las FFAA está en el orden lógico de los acontecimientos, si es que este presidente moribundo insiste en pensar que su régimen puede trascender su propia muerte, como si anduviera en planes de resurrección.
Entre los candidatos que entienden este problema solo hay dos, Diego Arria y Eduardo Fernández que dicen con claridad que propósitos tienen. Hay otros políticos como Henry Ramos Allup, que sabe cómo se bate el cobre y asume perfectamente a lo que hay que atenerse. Pero Henry no es candidato y aquí la muerte de este tipo puede ocurrir poco antes o luego de unas elecciones signadas por el ventajismo fraudulento, como es de esperarse.
Y el candidato, o quien pueda ejercer el liderazgo nacional, deberá saber con cuales tácticas y con cual estrategia deberemos superar en paz, ojala, la ruptura de este régimen, que es sobre lo cual se niegan a pronunciarse los candidaticos modosos.
E. Fernández propone una cohabitación legalizada, es decir que él, como presidente, desarrollaría el esquema actual de cogobierno con las instituciones centralistas como las FAB y otras instancias claves, manoseadas por el chavismo, que han coexistido aunque conflictivamente con líderes opositores regionales de clientelas de Estado, y hacerles entender a ambos bandos, que bien vale la pena entendernos entre todos, para evitarle al país ( o más bien a los interesados) desgarramientos que puede llegar a ser dolorosos.
Eso es serio. Uno puede repudiar ese plan y endilgarle gruesos calificativos, pero nadie puede quitarle que sea algo imaginado para unos propósitos que efectivamente pueden evitar traumas a muchos.
El Dr. Diego Arria propone OTRA estrategia. Hasta donde conozco sus opiniones e ideas programáticas, amen de lo dicho en muchas entrevistas, para empezar, Diego no espera la muerte de Chávez, para quererlo llevar ante el Tribunal Penal Internacional de La Haya. Eso es todo un signo, un estilo y una promesa de cambio drástico, sobre lo que Arria espera hacer, de ser él quien pueda asumir la conducción del Estado venezolano.
Arria propone nada menos que erradicar los gruesos vicios que se desarrollaron con esta apestosa administración, empezando por las FFAA, que han sido el sostén fundamental de este sistema de atropellos.
Entonces , quienes creamos que este desastre no puede tener remedios distintos, al de soluciones quirúrgicas contra tantos vicios acumulados y sus delictuosos responsables, desde antes y por supuesto luego de estos 13 años de oprobio, podemos asumir que este hombre habla en serio, sobre correctivos, sin los cuales vamos a desastres mayores a los ya padecidos y que si bien es cierto existen riesgos, también se sabe que no se puede enderezar caminos sino es aplicando una fuerza contraria con la ley en mano contra quienes hicieron incontables estropicios legales, económicos, sociales, diplomáticos, éticos, etc.
Puede negociarse sobre mucho. Puede por ejemplo enjuiciarse solo a los más prominentes como símbolo de que si se castiga el latrocinio y los abusos insolentes del poder, pero lo que no puede ocurrir es dejar impune esta destrucción nacional que tiene demasiadas victimas y unos miles de grandes beneficiarios. No sería mala idea como castigo, por ejemplo, dejarlos “limpios” sin lo saqueado, en cuentas en el mundo entero y mal recomendados.
Ver entrevista del Dr. Navarrete en Foro de C:L: en Noticiero Digital http://www.noticierodigital.com/forum/viewtopic.php?t=810237&sid=3bfdf29c73cf233020a34f8d629b3380