Hernández Montoya, presidente de CELARG: “Intento mirar las cosas sin el espejo retrovisor”
(%=Image(7498792,»R»)%) El día de ayer fue dado a conocer el nuevo equipo de trabajo que asumirá el vacío de liderazgo dejado por la saliente junta directiva del Centro de Estudios Latinoamericanos «Rómulo Gallegos» (Celarg), con Rigoberto Lanz a la cabeza, cuya renuncia, afirman sus miebros, fue consecuencia de los conflictos heredados por una gestión sin presupuesto.
Ahora, presidido por el Lic. Roberto Hernández Montoya, el Celarg contará con una Junta Directiva conformada por Alfredo Chacón, Luis Alberto Crespo, Tulio Monsalve, Sadia Sánchez Vegas, Reinaldo Rojas y María Josefina Tejera.
Hernández Montoya, a sabiendas de los problemas financieros que aquejan a esta institución, asegura no decaer en sus esfuerzos para seguir impulsado el principal objetivo de esta casa: la investigación y la formación en el área latinoamericana. Lejos de lo que podría considerarse como una actitud al mejor estilo de “borrón y cuenta nueva” (actitud la más de las veces reforzada por nuestros líderes políticos de todos los tiempos), Hernández Montoya comprende la importancia de dar valor a los logros positivos de las gestiones anteriores, potenciando sus características y programas, pues parte de una base institucional reconocida y bien constituida, que más que ser menoscabada, necesita reforzarse, y es que, como diría Hernández Montoya, “intento mirar las cosas sin el espejo retrovisor”.
Esperamos que este cambio de gestión venga acompañado, también, por un apoyo más fehaciente hacia la gestión cultural de parte del alto gobierno y de las autoridades del CONAC, pues sin presupuesto para cubrir las necesidades mínimas de mantenimiento, nómina y ejecución de proyectos, ni la junta directiva saliente, ni la entrante, pueden hacer mucho.
Si es cierto que la cultura es importante para el gobierno de turno, y si es cierto que comprenden su valor como base para la mejor construcción de la sociedad tanto en lo interno como en lo externo, pues entonces no debe ser obviado el potencial de las instituciones que, como el Celarg, han adquirido a través de los años, el perfil de una institución cultural de avanzada en América Latina.
No olvidemos: «La Fundación [Celarg] tiene por objeto la búsqueda de la integración latinoamericana y del Caribe a través de la Cultura, así como el estudio y difusión del pensamiento latinoamericano con énfasis en la obra y en la vida de Rómulo Gallegos y los valores de las letras y el pensamiento de Venezuela y de América Latina» (1).
Perfil:
Roberto Hernández Montoya es egresado de la Escuela de Letras de la Universidad Central de Venezuela; cursó estudios de análisis del discurso en la Escuela de Altos Estudios en Ciencias Sociales, París. Actualmente forma parte del Consejo de Redacción de Venezuela Analítica, donde además se desempeña como director de la publicación especial “BitBlioteca”. Escribe semanalmente para el periódico “El Nacional” y es columnista de Letras, Imagen, Internet World y Logotipos. Miembro de las direcciones editoriales de Venezuela Cultural e Imagen; fue Presidente fundador de la Asociación Venezolana de Editores y Director de la Editorial del Ateneo de Caracas. Es Secretario del Consejo Nacional de la Cultura (CONAC).
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(1) Tomado de los estatutos del Centro de Estudios Latinoamericanos Rómulo Gallegos (CELARG)