Tipo de cambio y distorsión comercial
En cefalalgia recurrente se ha convertido una condición monetaria o política monetarista impuesta inadvertidamente de facto, conocida como dolarización durante 10/219 bajo la convicción tan ingenua, como la de eliminación de ceros al bolívar, con miras a refrenar el proceso inflacionario de nuestra economía, en la cual también ha entrado a competir el euro, criptomonedas y hasta se pretendió incluir al yuan. Y, es así, cómo el tipo de cambio representa el valor de una moneda nacional en relación con otras monedas; las variaciones o brechas podrían tener un impacto significativo sobre la economía de un país puesto que afectan directamente, a las importaciones y exportaciones de los bienes.
Por tanto, al devaluarse la moneda nacional resultan más baratos a los compradores extranjeros, lo cual aumenta las exportaciones y reduce a las importaciones. Pero, cuando la moneda es fuerte, los precios son un poco más altos.
De cualquier modo, para reducir la brecha cambiaria en Venezuela el BCV debería continuar inyectando divisas a la banca hasta fines de diciembre del año actual: alrededor de unos 800 millones de dólares según estimaciones formales, a objeto de establecer una tasa competitiva coadyuvante de la producción nacional. Pues los US$480 millones inyectados durante octubre, no resultaron eficaces como para neutralizar esa brecha, a menos que algún factor perturbador como el narcolavado o blanqueo de capitales esté dificultando las operaciones.