Cómo empuñar el fuego creador
2da entrega del ciclo: CIRUGÍA DE CORAZÓN ABIERTO
De vez en cuando necesitamos preguntarnos las grandes preguntas en la vida: ¿Quién soy? ¿De qué se trata la Vida? ¿Para qué estoy en este mundo? Peor que estar perdido (no saber dónde estás), es creer que sabes donde estás y en verdad no ser así. La vida no decantada y con claros objetivos es igual a esta dicotomía.
«El misterio de la existencia humana no reside sólo en mantenerse con vida, sino en encontrar algo por lo que vivir» (Fyodor Dostoyevsky).
¡El Corazón tiene todo que ver con ello!
La Psique y el Corazón humano
El corazón humano es un pozo sin fondo, de él pueden salir las peores pesadillas y los tesoros más inauditos. Ya C.G. Jung clarificaba en su teoría de la psique humana que no sólo se comprendía del consciente y subconsciente personal, sino que yace en ella un pozo compartido que hunde sus raíces en lo más profundo de la historia de todos las experiencias y conexiones que los seres humanos hemos hecho desde, antes inclusive de emerger la consciencia, a saber, el Subconsciente Colectivo. No tengo del todo claro si el Corazón humano es el portal de acceso o es la Psique misma.
La realidad es que hay un Fuego Primordial en el fondo de nuestra más profunda realidad, un testimonio de aquel Fuego que nos dio la vida e inició la consciencia en la humanidad; la chispa divina, la imagen de Dios en nosotros… el Crisol de nuestra existencia se hunde muy profundo y tenemos acceso a él.
¿Cómo accedemos a dicha energía vital y vigorizante?
La estructura del corazón: las Creencias
Ya en la introducción a este ciclo (Cirugía de Corazón Abierto) mencionamos como las primeras creencias se forman independientes de nuestra decisión y son transparentes a nuestra consciencia, sirviendo de fundamento y abono para toda la estructura de creencias que van formando nuestra personalidad. Así que, sin darnos cuenta, vamos tomando decisiones y actuando en el mundo, sin reconocer qué opera detrás. No es hasta que decides asumir una creencia y actuar sobre ella, que descubres el conflicto interno y encuentras oposición para alcanzar aquello que ambicionas.
Las creencias no son unidades o ideas sostenidas en el aire, se forman como relatos, donde nosotros nos vemos empuñando dichas creencias… nos contamos a nosotros mismos como protagonistas de dichas creencias en acción. Ese relato puede ser consciente o inconsciente. En la introducción anterior mencioné como es cuando es inconsciente o transparente, ahora comento cómo es cuando es “consciente”.
Las creencias modelan nuestra vida
Sé que a algunos les parecerá una tontería, pero para los amigos de mi hija adolescente, desear y ambicionar un iPhone es algo crucial y nos sirve para ejemplarizar la idea. Para los adolescentes, y algún otro desubicado, lograr tener el último iPhone es un objetivo que amerita tener presente ese objetivo a cada instante disponible de nuestra consciencia, porque: quién somos con él… la creencia de quien llegamos a ser poseyéndole. Lo vemos cuando otros lo tienen en la calle, cuando nuestros amigos lo consiguen, nos vemos con él en la mano, nos imaginamos que otros nos ven con él y reconocen quién soy cuando lo “he logrado”. Es un relato que tiene protagonista, actores de reparto, objetivo y desenlace.
Hacemos todos los esfuerzos para alcanzar dicho relato, a veces sin limitar lo que es correcto o justo… el relato en nuestra cabeza es más importante que todos los obstáculos para conseguirlo.
Todas nuestras creencias funcionan igual. Cuando son transparentes, el ímpetu para alcanzarlo es como una corriente de resaca, no la vemos, pero nos lleva a donde nos lleva independiente de nuestra intención. Cuando es consciente, modela cómo nos sentimos, cómo experimentamos los obstáculos, inclusive qué vemos y cómo vemos lo que vemos.
El verdadero problema yace cuando esos objetivos son objetos u objetivos valorados por lo que sostiene la sociedad como importante, cuándo no son más grande que quién yo soy… entonces lo que está operando son mis creencias transparentes y camino por un laberinto para siempre volver a la experiencia que es empuñada por esa creencia y no la que yo pretendo empuñar.
El Corazón me devuelve lo que yo le alimento
En tecnología informática hay una premisa fundamental, “Garbage in, garbage out” (ES: Basura entra, basura sale). No puedes sacar algo diferente de lo que metes… el Corazón humano (o Psique) es la tecnología más avanzada del universo, ¿Por qué no operaría esta premisa con toda su fuerza?
Si lo que constituye el corazón son las creencias, si ellas operan eficientemente para condicionar cómo ves el mundo y cómo lo experimentas, ¿cómo puedes no esforzarte por discernir cuáles son las creencias que rigen tu vida y definen la calidad de vida que puedes alcanzar?
Si tus objetivos de vida no están claros, si son meros objetos y lo que buscan es vestir tus deficiencias para no sentirte desnudo, ¿en verdad crees que no te va a pasar factura?
En este escenario, ¿qué es la fe?
Tienes fe, aun cuando no es consciente, tienes fe de que las creencias son reales y, si actúas en consecuencia de ellas, te llevarán a la conclusión del relato que la creencia que anidas en tu Corazón. “la fe es la certeza de lo que se espera, la sustancia de lo que no se ve” (Pablo de Tarso), si clarificas tus creencias, el relato interior cambia y la fe que te hace actuar para alcanzar dicho relato, te orienta y te da fuerzas para alcanzarlo contra todo obstáculo o pronostico… opera igual que con las transparentes, porque tu Corazón modela como entiendes, percibes y operas en el mundo.
Así pues, para transformar tu vida, no dejes que una buena crisis de pierda, utiliza todo para descubrir quién eres y para qué estás viviendo…
La tristeza te prepara para la alegría. Violentamente barre todo de tu casa, para que la nueva alegría pueda encontrar espacio para entrar. Sacude las hojas amarillas de la rama de tu corazón, para que las hojas frescas y verdes puedan crecer en su lugar. Levanta las raíces podridas, de modo que las nuevas raíces escondidas debajo tengan espacio para crecer. Sacude toda tristeza de tu corazón, cosas mucho mejores tomarán su lugar.
Rumi
Empuña con determinación todas las opciones que te llevan a aceptar lo que sale de tu Corazón y reconocer, “hasta ahora he sido esto” y empuña la determinación para cambiar tu Vida, algo muy profundo en tu Corazón será tu aliado.
Próximo martes…
El laberinto de la fe
Enfrentamos un reto muy grande, tratar de desenmarañar la “fe religiosa», con toda esa carga confusa que la sociedad tiene, de esa fuerza que opera en nosotros para discernir el mundo y operar en él con sabiduría y gallardía.
EL PUNTO a la i
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