Ofertas a la carta: personalización y algoritmización
En la era digital, las marcas, influencers y empresas del entretenimiento compiten por nuestra atención, por lo que siempre están en la búsqueda de conectar de una forma más personal con nosotros y destacar sobre los demás.
En esta lucha incesante por nuestra atención, los contenidos personalizados se han convertido en una herramienta fundamental para lograr este objetivo al ofrecer experiencias más relevantes y atractivas; además, el uso de algoritmos para detectar nuestras preferencias es cada vez más común.
Promociones personalizadas
Detectar los patrones de consumo y las preferencias del usuario es clave para ofrecer una experiencia más cercana y personal. Esta información les permite a las marcas ofrecer promociones y ofertas hechas a la medida para cada usuario.
Por ejemplo, si el patrón de consumo indica que cada viernes un usuario determinado pide algún delivery de comida, es probable que las aplicaciones lancen promociones especiales para tal día de la semana. De igual forma, si el usuario prefiere jugar a las tragamonedas en lugar de otros juegos, las plataformas de juegos de azar crean bonos de casino que incluyen giros gratis para las slots que más ha jugado en las últimas semanas.
Recuerda que el Internet es una red, nada se escapa de ella, todo está interconectado; incluso tus interacciones y actividades más sencillas son analizadas para brindarte una mejor experiencia.
Correos electrónicos «artesanales»
Los correos electrónicos con publicidad son tan antiguos como el Internet; sin embargo, en la constante lucha por nuestra atención, hacernos sentir que somos parte de algo o que estamos recibiendo un producto diseñado solo para nosotros es primordial para las marcas.
Los newsletter, por ello, se han convertido en la nueva forma de acercar las marcas a los usuarios. Para muchos, esta forma de email marketing son los nuevos blogs, ya que es el propio usuario el que se suscribe a ellos, están escritos como si fueran cartas personales y contienen información valiosa del agrado del lector.
Todo esto sin ser una estrategia de publicidad intrusiva o agresiva, y que le da un valor añadido a la marca.
¿Es realmente todo a la medida?
Así como las aplicaciones de citas aseguran conseguir nuestra media naranja, los servicios de streaming prometen encontrar la película o serie perfecta para cada usuario; e incluso desechar los productos que no funcionarán según los gustos de los usuarios.
Los algoritmos de recomendación han sido parte clave del éxito de plataformas como Netflix o Spotify, puesto que ajustan sus contenidos a las necesidades de los usuarios. Sin embargo, a diferencia de las promociones o los newsletter, la «algoritmización» de los contenidos ha llevado a la creación de productos genéricos, sin alma.
Por esta razón, se debe marcar una línea entre la personalización y la algoritmización. Crear productos y campañas personalizadas permiten generar productos únicos y diseñados a la medida del consumidor, mientras que los contenidos algorítmicos les restan autenticidad.
Es necesario encontrar un equilibrio para el uso de la ciencia de datos. La personalización debe ser una herramienta para crear experiencias más humanas, no para deshumanizarlas.
