Huevos benedictinos para un desayuno especial
Los huevos benedictinos son una delicia. Su presencia es esencial en un buen brunch o en un desayuno especial. Nadie sabe a ciencia cierta cuál es el origen de este plato, aunque la tradición oral se lo atribuye a Samuel Benedict quién, según cuentan, pidió unos huevos escalfados con pan tostado, tocineta y salsa holandesa en un famoso hotel de Nueva York. Al chef del restaurante de ese hotel le pareció curiosa la combinación y lo agregó al menú.
No se puede comprobar si esto es una leyenda o no, porque hay otras fuentes que le atribuyen al platillo un origen anterior. En todo caso, es algo que vale la pena probar y la única complicación consiste en lograr escalfar bien los huevos. La siguiente receta es para 4 personas.
Ingredientes:
- 3 yemas de huevo
- 3/4 barra de mantequilla fría sin sal
- 1/4 de taza de agua
- Sal y pimienta al gusto
- 1 cucharada de jugo de limón
- 1 cucharada sopera de vinagre blanco
- 8 huevos enteros
- 8 trozos de jamón ahumado
- 2 cucharadas de mantequilla
- 4 muffins cortados en dos o pan para hamburguesa
- sal y pimienta
Se calientan las yemas en baño de maría junto con el agua y el jugo de limón y se bate a fuego lento. Después se agrega la mantequilla poco a poco, hasta lograr una sala holandesa espesa. Se añade sal y pimienta al gusto.
Para preparar los huevos poché o escalfados se debe colocar un poco de agua en una olla no demasiado profunda. Se hierve y se le agrega vinagre y sal. Cuando el agua esté hirviendo, baja la llama al mínimo y se vierten, con cuidado, uno por uno cada huevo entero. Con la ayuda de una cuchara se evita que el huevo se expanda mientras dure la cocción. Este proceso debe tomar alrededor de 3 minutos. Una vez listo, se saca el huevo y se coloca en una servilleta de papel absorbente, luego se repite la misma operación con los que faltan.
Aparte, se calienta el jamón en un un sartén con mantequilla por un minuto, hasta que este caliente.
Tostar los muffins —o como en este caso, pan de hamburguesas—, agregarles el jamón y el huevo y finalmente, la salsa.
Un acompañante ideal para este platillo es una mimosa. Para prepararla, solo hay que servir en una copa de champaña 1/3 de jugo de naranja bien frío al que se le agrega el resto de champaña, pro seco, cava helada.
