Venezuela: Último Año de Gobierno Chavista
- Crisis terminal
La crisis económica de Venezuela se ha convertido en una crisis política terminal para el gobierno de Maduro. Maduro perderá las elecciones parlamentarias de este año y saldrá a más tardar en 2016 del poder, sea por referéndum revocatorio, renuncia o intervención militar. Es prácticamente imposible que el oficialismo revierta este escenario. Con el 75% de la población en contra del gobierno de Maduro; con China negándose a inyectar más liquidez a una política económica idiota y suicida; con una oposición unificada para las elecciones parlamentarias y la cobardía sin límites de los gobernadores y líderes del PSUV para cambiar el rumbo del país, el oficialismo ha perdido todo poder de negociación para salvarse. La troika Maduro-Cabello-Arreaza se mantiene sobre mentiras y bayonetas. Pero, las mentiras (“guerra económica”) ya sólo convencen al 20% de la población y el tiempo de las bayonetas se acaba. En menos de dos años, una troika de ineptos y prepotentes ha despilfarrado la herencia de lucha popular de generaciones; desprestigiado la alternativa del Socialismo del Siglo 21 y creado las condiciones para la reconquista del poder por la oligarquía y el imperialismo.
- Economía política del debacle
La crisis terminal es resultado del fallido intento de la Nueva Clase Política “bolivariana”, de monopolizar el poder político monopolizando el plusproducto petrolero. En un raro momento de verdad, el Gobernador del estado Anzoátegui, Aristóbulo Istúriz, reconoció públicamente (14.7.2014) esa estratagema: “El control de cambio en Venezuela no es una medida económica…, es una medida política. Porque si nosotros quitamos el control de cambio, ustedes sacan los dólares y nos tumban. Mientras gobernemos tendremos que tener control de cambio. […] Y tendremos que amoldarnos, con control de cambio, a manejar la economía”.
Dirigir un país a través del control del plusproducto –medida recomendada por Fidel a Chávez— es una política correcta. De hecho, todas las clases dominantes del mundo lo hacen. Pero, hay que saber hacerlo. Y ahí, la troika tenía todo resuelto. Delante de sus narices, Evo Morales, Rafael Correa, Lula y Daniel Ortega, aplicaban exitosamente el know how del desarrollismo criollo viable en América Latina. Simplemente, tenían que entender y asimilar la dialéctica de este desarrollismo. Pero, su incultura, arrogancia e ideología delusional (delusional thinking) lo impidieron y llevaron la economía nacional al actual panorama desolador. Las cifras del PIB, del déficit fiscal, de la inflación, de las reservas internacionales, de la sobrevaluación, etc., describen el panorama con precisión; mientras que el precio bajo del petróleo y la incapacidad de someter mercantilmente a Arabia Saudita, Irak y Qatar, aborta las esperanzas de una pronta recuperación.
- Se asoma el Leviatán
En su sobreestimación infantil del poder del Estado frente a la sociedad, y su hybris generalizada, la nomenclatura del PSUV convirtió la crisis económica en crisis política. Su receta de autodestrucción consta de tres elementos: a) no hacer las reformas necesarias cuando tenía el poder de negociación necesario, después de la elección de Maduro; b) no entender que su mentira de “guerra económica” tenía un ciclo de manipulación efectiva limitado, como toda propaganda; c) al obligar al ciudadano a presentar documentos de identidad, registrarse, someterse a controles biométricos, conculcarle sus derechos civiles y constitucionales (prohibición de pernoctar fuera de supermercados) etc. —y toda esta parafernalia para comprar un kilo de papas (sic)— lo humillan, muestran que su modelo económico es inviable y exhiben la cara de Leviatán del Estado (policiaco).
- La negación de China
El gobierno chino ha tenido tres fases en su trato con la troika. Cuando –por default— la troika llegó al Palacio de Miraflores, Beijing creyó en los reportes triunfalistas de los burócratas de su embajada, de que todo iba viento en popa. Cuando los índices de disfuncionalidad de la troika se hicieron más evidentes, Beijing aceptó que había una alta probabilidad, de que fracasara. Pero, para proteger sus inversiones de alrededor de 50 mil millones de dólares, por razones de Estado y geopolítica, decidió seguir apoyando, para evitar el peligro de un gobierno de derecha pro-gringa. Sin embargo, con el fracaso de la desesperada e improvisada visita de Maduro a China, Rusia y los países de Medio Oriente, quedó claro que Beijing ha abandonado la esperanza de que la troika pueda salvarse. Le negó a Maduro la liquidez necesaria ($16 mrd) para mantener su reality show” de “socialismo” hasta las elecciones. Para Beijing, la troika ya ha entrado en un de facto default político-económico. Es una conclusión nada dramática ni sorprendente. Simplemente reconoce una verdad objetiva que en lo económico ya había sido evidenciada por múltiples instituciones financieras del Capital.
- Las mayorías se van – el fin del Chavismo
La sentencia al colapso de la troika está escrita en la evaluación de su gestión en las últimas encuestas nacionales. El 84% de la población considera la situación del país mala o muy mala; el 74% piensa que la gestión de Maduro es mala; el 72% no creen “nada” de las declaraciones del Presidente sobre la economía; el 70% no quiere que siga más allá del 2016; el 86% lo considera responsable de las colas; la presencia de los militares en el gobierno es considerado malo por un 70% y el 75% cree que la situación económica es ahora peor o mucho peor que hace un año.
Maduro es, hoy día, un general sin tropas. Pero, peor, sin espacios de maniobra: el 80% de los encuestados está en contra de una devaluación del bolívar; el 70% en contra del aumento de la gasolina; el 85% rechaza las expropiaciones como mecanismo para resolver la crisis y más del 90% considera indispensable un acuerdo entre el sector público y el privado para enfrentar la crisis.
- La batalla decisiva y el colapso de la 6ta República
La troika y su sumisa nomenclatura entran ahora a la batalla decisiva por el poder. Pero, comandan una fuerza fantasma. No tienen programa, ni cuerpo dirigente, ni narrativa o mística de guerra, ni tropas (apoyo popular/clase media), ni dinero. Es decir, carecen de los recursos básicos para vencer. Y, aunque en la guerra se cuentan los muertos después de la batalla, es obvio, que el destino de la batalla está sellado.
Ante esta situación, al 40% de los ciudadanos que no quieren votar ni por la troika moribunda, ni por la derecha unificada de Capriles-Falcón-López, les queda un solo camino de acción, para garantizar su futuro y el de la Patria. Formar un partido político de centro que rompa el nuevo nefasto bipartidismo venezolano.
Ya el hecho de posponer su obligatoria rendición de cuentas ante la AN – la cual controla- nos está indicando la improvisación y el desespero que cunde en el Alto Gobierno. Quitando y poniendo argumentos, tratamiento de los puntos claves como puede ser el problema cambiario, la devaluación implícita de nuestro signo monetario, el maquillar el fracaso de su ´´gira´´, el ver como el país se le escapa de las manos y toda se desintegra a su alrededor, el ver como fue tratado a manera de ´´segundón´´ o como dice un párrafo de una conocida gaita zuliana : ´´marginado y sin un real´´, tratará de poner buena cara aunque la procesión vaya por dentro ; y además, como dijo su ´´hombre fuerte´´ : …´´ no nos vamos a dejar joder´´. Así que pataleará, amenazará, porque para él, estamos en ´´guerra´´. Un guión harto conocido por todos los venezolanos.
Lo cierto es que la ´´Caja de Pandora´´ por fin se abrió y están saliendo a borbotones todos los demonios conocidos y por conocer, pues en esta especie de ´´Crónica de una muerte anunciada´´, tanto el ex Caudillo como el presidente Maduro son los únicos responsables de esta debacle donde no se ahorró ni un ´´penique´´, y ahora el gobierno ha quedado con ´´una mano adelante y otra atrás´´. Y puede que el día que se descubran y estudien los documentos que comprometen a el Alto Gobierno en graves actos de corrupción, pues la actual administración está plagada de muchos ´´chinitos de Recadi´ que andan orondos por las calles, mas de uno se llevará las manos a la cabeza y exclamará : ¡ No puede ser !. Así están las cosas.
Lo planteado por el señor Dieterich es hasta un pálido reflejo de la realidad dentro de un sucinto reflejo de la misma. La verdadera realidad, de conocerla, nos dejaría ´´aterrorizados´´ frente al drama que representa el poco margen de maniobra que le queda al régimen y que debería obligarlo a rectificar el rumbo, pero no lo hará porque ni quiere hacerlo ni puede. Sigue el único camino que conoce aun a sabiendas que perecerá en el intento, es lo que suele suceder en los finales de los regímenes totalitarios que no ven la proximidad de su caída, hasta el momento mismo del evento.
Pese a lo anterior, el problema de fondo es si la otra ´´opción´´ está preparada y ha madurado lo suficiente como para asumir la tamaña responsabilidad de reconstruir el país dentro de un marco de ´´unidad incondicional´´. Una especie de ´´Pacto de Punto Fijo´´, renovado y adaptado a esta nueva realidad que parece requerir de medidas excepcionales y audaces que implican mucho coraje y una gran imaginación. Y es que ni así podemos afirmar con certeza absoluta que ese experimento no pueda naufragar dadas las diferencias y peculiaridades políticas de sus diferentes integrantes. De entrada, recursos económicos no hay y el pueblo sufre de grandes carencias como para esperar mucho tiempo. Quizá, ha llegado el momento de los liderazgos desconocidos y emergentes. Ya veremos cómo se comportan nuestros líderes y cual será su aparentemente incierto futuro…
A Dieterich deberían nombrarlo Presidente Emérito los de Marea Socialista, pues él también sostiene las sandeces que atribuyen cualidades a las torpezas, con el Charlatán Eterno al frente, que se cometieron del 99 al 2012, pero afincan sus críticas sobre Maduro-Diosdado-Arreaza (2013-2014), como si esas tres plagas no hubieran sido enchufados del Patán Supremo y hoy disfrutan de las posiciones que aquel les otorgó: «la herencia de lucha popular de generaciones; desprestigiado la alternativa del Socialismo del Siglo 21 y creado las condiciones para la reconquista del poder por la oligarquía y el imperialismo.» Eso de lucha popular de generaciones suena a pura paja, esa masa fue adeca, fue copeyana, fue chiripero, fue chavista, y de manera oportunista será soporte del gobierno de transición, al desplome de esta agonizante Mojiganga. «La alternativa del Socialismo del Siglo 21» nunca ha existido, SIEMPRE fue el mejjjmo Comunismo estalinista del siglo 20, y para colmo dirigida desde La Habana, por la parasitaria Monarquía castrista, el desprestigio lo produjeron estos 16 años de Corrupción, Improvisación, Incapacidad y el brutal anacronismo de alinearse al experimento que ha fracasado TODAS LAS VECES. Y mencionar a la Oligarquía y al Imperialismo, sólo demuestra que no tienen argumentos ni reconocen la Realidad, y siguen echando mano de las excusas tradicionales y dogmáticas. Es el pueblo que les da la espalda, porque ya los chavistas no tienen qué ofrecer, rasparon la olla, y nadie les va a prestar por haber demostrado ser pésimos administradores.
¿Por qué Dieterich no le advirtió a Hugo Chávez en su
oportunidad, acerca de lo que el autor
menciona en su texto de hoy? Algo que nuestros analistas criollos ya habían (y
continúan haciéndolo) advertido. Llamar troika
al trío que menciona es, cuando menos, una inconsistencia intelectual, que
Dieterich sería el más llamado a rechazar. El señor Arreaza es el personaje más
anodino, incoloro e ineficaz del gobierno, con escasos méritos y conocimientos,
con lo cual está muy ajustado a su entorno.
¿Creyó alguien en Venezuela, que el sistema de control de
cambio era solamente una estrategia económica, según el contenido del párrafo 2?
¡No somos tan estúpidos, Heinz!
Al autor le duele el desprestigio actual de “su” socialismo
del siglo 21, que vendió muy bien a Hugo Chávez. Éste no solamente fue
embaucado con ello, sino que lo retribuyó generosamente en moneda extranjera.
No es muy difícil que un sociólogo germano, de tendencia
izquierdista, pueda tener cabida o contar con receptividad en los medios
académicos mexicanos, particularmente en sus universidades públicas. Y eso ha
hecho Dieterich al ser acogido en la Universidad Autónoma Mexicana (UAM) de Ciudad
de México, fundada por el expresidente Echeverría en 1974 (no confundir con la
UNAM, Universidad Nacional Autónoma de México, de rancia tradición). Es el
fantasma aún presente del complejo latino frente a la Europa tradicionalista.
Después de haberse desligado del chavismo (los mismos lo
llamarían traición), ¿cuántas veces no nos “predijo” Dieterich la caída
inminente del Chávez y su movimiento? Hasta tres meses le concedió en cierta
ocasión.
¿Cuál es la novedad de lo expresado en el párrafo 3 de su
texto, más allá de lo que, nuevamente, hayan manifestado nuestros especialistas
de “oposición” hasta el cansancio? La negación de China a los requerimientos de
Maduro (párrafo 4) también había sido predicha por esos mismos especialistas. ¡Todo
ello producto de la ignorancia y prepotencia gubernamentales!
¿Por qué recurrir a los términos de “delusional thinking”,
cuando delusion es un concepto
patológico establecido en la psiquiatría, ciencias neurológicas o enfermedades
mentales? Y para el cual existen equivalentes en español. ¿No era Dieterich el
promotor/vendedor de la idea de un Chávez superior, rayano en la genialidad, libre
de la duda de estar efectado por un desorden mental, a pesar de estar sujeto al
carbonato de litio para controlar su problema bipolar? ¿O es que ahora sí
observa lo que hace escasos años no quiso ver, porque su hipótesis del socialismo
del siglo 21 estaba en peligro de desprestigio político?
La expresión “nefasto bipartidismo venezolano” no solamente
es peyorativa sino falsa hacia todo lo que ha sido el desarrollo democrático de
Venezuela (muestra de la ignorancia de Dieterich al respecto), mencionado al
final del párrafo 6, donde también convoca, cual ángel exterminador, a un Armagedón
venezolano. Una vez más se equivoca. Pero sí hay que concederle razón en su
comentario de la primera parte del mismo párrafo “…comandan una fuerza fantasma”.
Y las que en una época fueron sus “mayorías”, ahora, muy disminuidas, abandonan
al chavismo.
En fin de cuentas, con el hundimiento del régimen
chavo-madurista (y hasta castrista, algo en lo cual es muy versado Dieterich)
se desacredita su hipótesis del socialismo del siglo 21, tanto en lo social
como en lo económico y sobre la democracia, como intentó venderlo globalmente
en su libro de 1996.
Como corolario, una vez más debemos admitir, que la
solución a nuestra tragedia venezolana está en nuestras manos, aunque
aparentemente seamos incapaces. ¡Solamente!
Señor Heinz, con todo respeto, ¿es normal criticar al «buseta» Maduro cuando la culpa (real y única) es de su querido Chavez? Chavez tuvo el petróleo a 120 dólares ¡así cualquiera!
El populismo es ¡siempre! ruina, ruina y ruina, y siempre hacen lo mismo.
Empiezan a imprimir billetes, lo que hace subir la inflación, ya que tienen que costear su política populista. La inflación empieza a subir al año y medio (cosa que la población no entiende, ¿por qué la barra de pan cuesta el doble en un año?), pero ahí aparece chavez diciendo que la culpa es del panadero ¿a que si Heinz?
Y esperemos la ruina de Ecuador, Guatemala, Bolivia y Argentina ¿Y después que diremos Sr Heinz? ¿Que la culpa es del demoniaco capitalismo?.
Pasan los años y los años y todavía hay gente (la más inculta y algún aprovechado) que sigue queriendo el populismo comunistoide, que pena….
Sus palabras: «..la reconquista del poder por la oligarquía y el imperialismo.».
En esas palabras usted congloba los sistemas democráticos que, con variaciones bastante limitadas, están gobernando el mundo occidental?
O sea que Suiza, Dinamarca, Canadá. Australia serían presas de la «oligarquía y el imperialismo»??
Cree que los pueblos en esos Países cambiarían su sistemas?
Está convencido que eso Pueblos viven mal? En la pobreza, el hambre, el atraso, en una estridente desigualdad social?
Vamos dieterich…termine con sus sandeces. Cree que la gente preferiría vivir como en China..o en la Cuba de su querido monstruo de Birán?
Y…por qué usted no se muda por la isla? Por qué sigue viviendo en un sistema en el cual dominan la «oligarquía y el imperialismo»? Será que no son malos como quiere hacer ver?
Bien…tenemos un payaso intelectual…o un intelectual payaso?