La Navidad y el difícil año nuevo
No hubiéramos querido nunca escribir un editorial como este, pero sería una hipocresía en Venezuela hacer uno de corte tradicional lleno de alegría y esperanzas por un mejor futuro.
¿Cómo podemos estar alegres? Hay tantos venezolanos que padecen en prisión por las decisiones arbitrarias de un gobierno que pretende excluir, y peor aún, satanizar a quienes no comparten su extraña ideología.
Aunque nuestra manera de ver es y seguirá siendo optimista, no podemos negar que el Año Nuevo se iniciará, si no hay cambios en la manera de gobernar, sobre un mal pie. La inflación, la escasez y la inseguridad seguirán su carrera vertiginosa hasta llegar al máximo grado imaginable del caos económico y social.
Sin embargo, no queremos cerrar estas líneas sin expresar, con fervor, un canto a la esperanza y que los venezolanos de ambos lado del espectro político, entendamos que lo que nos está destruyendo es una absurda polarización, y que sólo lograremos resolver la crisis si nos damos sinceramente la mano e iniciamos a remar juntos para reconstruir a una Venezuela, que en el fondo de nuestros corazones todos amamos.
Luego de un viaje de ida y vuelta a Valera desde Maracaibo, con una batería prestada y de que la »mafia» nos ruleteara todo el día de un sitio a otro en un ambiente de mutua desconfianza aunque con la cortesía del andino, logré adquirir una Duncan de 650 amperios por la ´´módica´´ suma de 7.300,00 Bs/ f, pero facturada en algo mas de 3.000 Bs/f y entregando los despojos de la vieja batería, que afortunadamente se me ocurrió llevar. Era eso, o dejar sin el vehículo a mi esposa al regreso de su viaje, lo que se traduciría en que hasta mejor sería enfrentar a un ´´pelotón de fusilamiento´´. De mas está está decir que que quedé molido y triturado con el regreso a Maracaibo, de noche y con colas cargadas de cemento que dificultaban la circulación en medio de una oscuridad espantosa…
Lo anterior no es una novela ni el párrafo de un cuento corto, es la dura realidad que confrontamos todos los venezolanos todos los días del año para medio sobrevivir en medio de este desorden generalizado de caos y anarquía sin precedentes. Y es que el EDITORIAL de hoy no exagera ni un ápice, en todo el país se respira una atmósfera de frustración, preocupación y una tristeza que nos hacen pensar que el ´´ Espíritu de la Navidad ´´ tendrá que esperar mejores tiempos para que retorne a este país caído en desgracia. Y es que absolutamente todos los venezolanos no quisieran que llegara el 2015, pues están conscientes que será un año mucho mas duro que este que finaliza y su único deseo al ´´Niño Jesús´´es que explote esto de una buena vez, pase lo que pase.
La afirmación de que ahora si se acabó el ´´ pan de piquito ´´ y que habrá que pagar por todo en boca de la señora Faría es un adelanto de lo que nos espera. Como si aquí nunca hubiésemos tenido que pagar hasta por respirar y sufrir el ´´matraqueo´´ permanente de las autoridades. Mejor hubiese dicho que nos espera lo mas parecido a los ´´planes especiales´´ de los cubanos. Pero lo que mas irrita, es que al final seremos nosotros los que subsidiaremos al gobierno para que continúen robando y con el agravante de que aspiran a continuar gobernándonos hasta la consumación de los tiempos. ¡ Abrase visto tamaño dislate !. Y es que los recientes nombramientos hechos por el gobierno en el proceso de ´´renovación´´ de algunos poderes públicos nos lo están diciendo todo. Bien ha actuado la oposición al no levantar la mano en ese antro que llaman la Asamblea Nacional. Siempre digo que no voy a votar mas nunca y siempre termino votando, y no es por ser masoquista, es por lo que expresa el EDITORIAL, nunca debemos renunciar al optimismo y la esperanza, puesto que el día que las perdamos, dejaremos de ser libres para convertirnos en esclavos. Y es que, si alguien se quiere retratar con los del gobierno, ´´besuquearse´´ y hasta ´´darles la mano´´, ese es su problema. Yo se la doy al pueblo rojo llano y sencillo con los que no tengo ningún problema y con los que convivo en medio de un gran respeto y consideración. Ellos están igual de ´´fregados´´ que nosotros, y obstinados de tantos abusos, desafueros y explotación.
A todos mis compatriotas, les deseo un ´´feliz´´ 24 de Diciembre. Por mi parte, me comeré unas sabrosas hayacas andinas acompañadas de un buen aguardiente casero, y para el mañana, Dios dirá…
Como todos lo años en este último día del 2014 le deseo a los amigos de Analítica.com paz y tranquilidad que no prosperidad porque eso no sucederá ni aun deseándolo. Ha sido un año terrible y el próximo será peor, pero dentro de este convulso año nos sentimos obligados a ser agradecidos por la tolerancia y la paciencia para con nosotros los lectores por los oportunos e inteligentes EDITORIALES y tan calificados articulistas que van enriqueciendo nuestra manera de ver la realidad de nuestro país, y que tanto contribuyen a motivarnos para hacer comentarios sobre su importante trabajo. Si en algún momento alguien se ha sentido molesto por éllos (los comentarios), le pido mil perdones, pues nunca ha habido la intención de ofender a nadie y tan solo nos ha motivado el deseo de buscar y encontrar la verdad donde quiera que esta se encuentre o al menos intentarlo dentro de nuestras humanas limitaciones.
Que 2015 nos encuentre mas unidos que nunca pues la presente hora y las por venir serán definitivas para sellar el destino de nuestra nación y el de todos los venezolanos de buena voluntad.
Nuevamente, GRACIAS.