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San Romero de América

El Papa Francisco firmó el 3 de febrero el decreto que declara a Monseñor Oscar Arnulfo Romero Mártir de la Iglesia, acelerando su beatificación. Con la decisión favorable de la Congregación para las Causas de los Santos y el visto bueno de la Congregación de la Doctrina de la Fe, dirigida por el Cardenal Ratzinger (Beneficto XVI), el Santo Padre abre el camino a la canonización del ex arzobispo de San Salvador, asesinado por un francotirador de extrema derecha el 24 de marzo de 1980, mientras oficiaba una misa en el Hospital de la Divina Providencia. Su causa ha sido llevada por el obispo italiano Vincenzo Paglia.

El Salvador vivía una virtual guerra civil y sufría una cruel dictadura militar, luego del fraude electoral que llevó al poder al Gral. Carlos H. Romero. Monseñor Romero abogaba por la paz y la tolerancia, invocando la palabra de Jesús. Defendía a los pobres y a los campesinos. Sus homilías se hicieron incómodas al régimen dictatorial; pero el pastor católico no cesó de suplicar por los derechos humanos, condenando la violencia desatada por grupos de extrema derecha y extrema izquierda.

Oscar Arnulfo Romero nació en Ciudad Barrios el 15 de agosto de 1917, hijo del matrimonio del telegrafista Santos Romero y Guadalupe Galdámez. Desde niño mostró su vocación cristiana y a los 13 años ingresó al seminario de San Miguel; a los 20 se unió al seminario de San José de la Montaña de San Salvador, completando su formación teológica en la Pontificia Universidad Gregoriana de Roma, donde se ordenó sacerdote en 1942. Regresó a su país natal e hizo vida pastoral al lado de los desposeídos y desarraigados. En 1977, su antiguo maestro, el Papa Pablo VI, le designó arzobispo de San Salvador, y este declaró: La misión de la Iglesia es identificarse con los pobres, así la Iglesia encuentra su salvación.”

Monseñor Romero denunció la desaparición forzada de personas y los asesinatos perpetrados por los escuadrones de la muerte y los cuerpos de seguridad de la dictadura. La Voz de los Sin Voces es recordada por Rubén Blades en su canción El Padre Antonio y el Monaguillo Andrés y su estatua figura entre los diez mártires del siglo XX en la Abadía de Westminster de Londres.

Francisco beatificará a un apóstol de la justicia social.

@lxgrisanti

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