Producción sí, expropiación no
La expropiación realizada a los galpones de Empresas Polar en La Yaguara, es un error que tendrá serias consecuencias. Está visto que las expropiaciones han sido una de las aristas que causantes de la grave crisis de la economía nacional ¿Qué país se ha desarrollado golpeando a la iniciativa privada y destruyendo el aparato productivo?
El empecinamiento de Maduro en destruir a Empresas Polar, bajo el supuesto de que esta compañía es la personificación de una inexistente guerra económica, tendrá efectos muy graves en el abastecimiento de muchos productos nacionales sin que estos puedan ser remplazados, ni por las inexistentes o inoperantes empresas del Estado, ni mucho menos por la importación, ya que no hay las divisas para hacerla.
Si no entienden que para superar la crisis -que terminará hundiéndonos en un hueco sin fondo- se requiere un gran acuerdo nacional, no habrá nada ni nadie que nos salve del peor desastre en toda la historia de nuestro país.
La opción está a la vista: incentivar la producción nacional, desde el más pequeño productor hasta los empresarios. Frente a la falta de divisas es imprescindible hacerlo, producir al menos lo que consumimos. Venezuela debe superar su fase rentista petrolera para convertirse, con el esfuerzo de todos, en una economía diversificada y solidaria.
Con los sucesos de San Félix se pone en evidencia la gravedad de la actual escasez a todos los niveles productivos del país, pero particularmente en el sector de los alimentos. Y sin embargo, el gobierno se empeña en destruir las pocas fuentes confiables de aquéllas compañías que pese a la crisis siguen produciendo alimentos de manera casi constante. Y es que no se puede hostigar de esa forma a las empresas que precisamente están haciendo lo imposible por paliar el problema. No solo se afecta a la compañía y a sus trabajadores, sino a las comunidades donde están asentadas y se hace imponer tan absurdas decisiones siguiendo criterios políticos por encima de las necesidades físicas de los ciudadanos guiándose por criterios políticos. Un absurdo por donde se mire.
Esta ´´guerra económica´´ desatada por el gobierno contra el sector privado no solo no conduce a nada positivo, sino que por el contrario crea mas desconfianza y zozobra en la sociedad quien ya comienza a reaccionar de manera violenta y a defender esas unidades productivas de manera abierta y determinante. Le están diciendo al gobierno que están equivocados y que no están dispuestos a acompañarlos en esa aventura, pues son peores los daños que los beneficios. Así no se ´´dialoga´´ ni así vamos a salir del problema tan grave en el que nos encontramos. Ya han sido mas que suficientes dieciséis años de fracasos económicos e inducir a la quiebra a una nación que teniéndolo todo, hoy no tiene nada.
Decisiones que se toman en un momento en que se mal mantiene a flote un país porque todavía hay financistas interesados que siembran a futuro y solo ellos saben porque lo hacen , pero que en modo alguno contribuyen a aliviar las profundas desigualdades que se han profundizado en el tiempo y amenazan la relativa paz que aun queda pero que ha de ser remplazada por mas violencia si los niveles de inseguridad continúan creciendo sin control alguno. Y es que a ciencia cierta, esta fracasada economía de puertos no teniendo con que pagarlas resulta un contrasentido : se dan créditos a la producción en bolívares pero no hay dólares para traer insumos ni tecnología moderna para incrementar la producción, con lo que la parálisis del empresario privado se paraliza. En suma, un gigantesco despilfarro de recursos que terminan alimentando la gigantesca maquinaria de la corrupción. Así ningún modelo económico puede funcionar y está condenado al fracaso, como lo evidenciamos todos los días del año…
Ya el CAMBIO es una necesidad hasta como un simple medio de supervivencia nacional.