Ya está suspendida la venta por cédula en Abastos Bicentenario, Pdval y Makro. El resto de los supermercados privados sí continuarán con ese sistema de venta al público hasta nuevo aviso.
Las sucursales de abastos públicos que tienen en sus establecimientos el sistema biométrico de captahuellas fueron autorizadas para suspender la venta de productos regulados por el número final de la cédula de identidad.
Es así como Bicentenario, Makro y Pdval ya no venderán productos según ese método y se estima que Mercal tampoco. La visita a esos supermercados podrá hacerse todos los días de la semana, pero no podrá repetirse la compra de un mismo producto y, en todo caso, la cantidad -en el caso de los regulados- estará restringida a determinada cantidad semanal.
La eliminación de ventas por el terminal del número de cédula y emplear sólo las captahuellas como control obedece a que personas inescrupulosas habían falsificado la cédula para comprar todos los días, trascendió en fuentes oficiales.
Un recorrido realizado por diferentes sucursales públicas y privadas que utilizan captahuellas y constató que, efectivamente, en Bicentenario y Pdval la venta está liberada, aunque sí continúa la limitación por cantidades según el producto regulado.
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